Para muchos hogares, revisar la factura de la luz cada mes se ha vuelto motivo de preocupación. A pesar de que intentamos moderar el uso de electrodomésticos, los costos siguen en aumento e impactando en los bolsillos. Lo que pocos saben es que ciertos aparatos siguen incrementando el consumo eléctrico incluso cuando no están en uso.

Este tipo de consumo eléctrico se da cuando un dispositivo continúa utilizando electricidad aunque esté apagado, simplemente por estar conectado a la corriente. Si bien parece inofensivo, a largo plazo puede representar un gasto considerable.

Pequeños cambios que alivian el bolsillo y la factura de la luz

Una manera efectiva de reducir el consumo eléctrico es desconectar ciertos equipos durante las horas en que no se utilizan, especialmente por la noche. Incorporar este hábito puede traducirse en una disminución notoria en la próxima factura de la luz.

Uno de los principales culpables es el televisor. Aunque esté apagado desde el control remoto, sigue recibiendo energía. Desenchufarlo al final del día es una decisión sencilla que puede hacer la diferencia. Lo mismo ocurre con computadoras de escritorio o portátiles: mantenerlas conectadas sin uso prolonga su consumo y, en el caso de los portátiles, cargarlos toda la noche también significa desperdiciar electricidad.

Electrodomésticos silenciosos pero costosos

En la cocina, varios artefactos son responsables de un gasto innecesario cuando permanecen enchufados sin estar en funcionamiento. El microondas, la tostadora, la cafetera eléctrica, la pava y hasta el horno eléctrico, aunque parezcan inactivos, consumen energía por estar conectados. La solución: enchufarlos solo en el momento de usarlos.

Uno de los más olvidados es el cargador de celular. Es muy común dejar el teléfono cargando durante la noche, pero una vez que la batería llega al 100%, el equipo sigue absorbiendo electricidad sin necesidad. Esto no solo aumenta el gasto energético, sino que también puede dañar la batería del dispositivo a largo plazo.

Cables múltiples: prácticos pero engañosos en el consumo eléctrico

Los alargadores también contribuyen al consumo eléctrico silencioso. Si bien permiten conectar varios dispositivos al mismo tiempo, cuando no están en uso, conviene desconectarlos por completo. Dejar una zapatilla enchufada con varios aparatos apagados no evita que siga habiendo circulación de energía.