El Gran Premio de Países Bajos dejó sensaciones encontradas para Franco Colapinto y para Alpine. El piloto argentino completó su mejor actuación desde que llegó a la Fórmula 1, pero finalizó en el 11° puesto, a las puertas de los puntos. La falta de decisión en las vueltas finales y la resistencia de Pierre Gasly, con neumáticos desgastados, terminaron frustrando la chance de sumar.

Briatore cambió el discurso

Flavio Briatore, asesor ejecutivo de Alpine, había criticado a Colapinto durante el fin de semana, pero tras la carrera modificó su postura y elogió su rendimiento: “Franco hizo una carrera muy buena, probablemente la más sólida de la temporada hasta la fecha”, dijo.

Sin embargo, lejos de reconocer errores de gestión dentro del equipo, Briatore sostuvo que se trató de una oportunidad perdida por “diversas razones” y defendió la estrategia aplicada: “Asumimos algunos riesgos para maximizar nuestras posibilidades. Ambos pilotos presionaron al máximo y jugaron como un equipo”, señaló.

El otro protagonista de la polémica, Gasly, explicó que hizo lo posible con neumáticos duros usados: “Fue una carrera muy difícil en muchos aspectos. Intenté luchar con todas mis fuerzas, pero simplemente no funcionó”.

Un paso adelante para Colapinto

Más allá de la bronca por el 11° puesto, Colapinto salió fortalecido del fin de semana en Zandvoort. Su rendimiento convenció a Briatore y lo consolidó como pieza clave de Alpine en un contexto donde cada decisión estratégica puede definir la pelea por los puntos.

La próxima oportunidad llegará en Monza, donde el argentino intentará transformar los elogios en resultados concretos.