Lo que comenzó como un sueño en los días más inciertos de la pandemia hoy se materializa en ladrillos y en fe compartida. Mendoza será el primer lugar del mundo en tener una capilla dedicada a Carlo Acutis, un joven que hizo de la tecnología un puente hacia lo divino y será canonizado el próximo 7 de septiembre.

La obra, prevista para concluir en 2027, no es sólo un templo, sino un llamado a la espiritualidad en tiempos de pantallas y conexiones digitales. Y será también un legado para las próximas generaciones, que encontrarán en Chacras de Coria un espacio inspirado en un santo que entendió como pocos el lenguaje de su tiempo.

El proyecto comenzó en 2020 como un deseo del padre Osvaldo Scandura, párroco de Nuestra Señora del Perpetuo Socorro. Hoy se encuentra en un 4% de avance general y en un 35% en lo estructural. En tanto, la etapa más ardua se avecina con el revestimiento en piedra, que requerirá mano de obra especializada y un esfuerzo económico sostenido. Los materiales ya fueron donados, pero la manufactura se financiará gracias a una colecta internacional que acompaña la canonización del beato.

De idea imposible a obra colectiva

Empresarios, familias y fieles de Mendoza aportaron recursos y trabajo, y el Arzobispado acompañó la iniciativa con la donación de un terreno sobre calle Viamonte al 1.000.

Por la muerte del papa Francisco, suspendieron la canonización de Carlo Acutis

La ubicación no es casual. Se encuentra a 13 kilómetros de la capital provincial, muy cerca de la zona de boliches donde cada fin de semana miles de jóvenes celebran la vida nocturna. La capilla, de diseño moderno y equipada con tecnología de última generación, busca precisamente atraer a las nuevas generaciones hacia un espacio de espiritualidad.

Un hito para la Iglesia

La canonización de Carlo Acutis marcará un antes y un después para la Iglesia Católica. Será el primer santo del milenio, un joven que murió en 2006 con sólo 15 años y que supo utilizar la informática e internet para evangelizar.

Nacido en Londres en 1991 y criado en Milán, Carlo vivió como cualquier adolescente de su época: jugaba al fútbol, disfrutaba de los videojuegos y programaba en su computadora. Pero al mismo tiempo desarrolló una vida espiritual intensa y una devoción particular por la Eucaristía. A los 11 años creó un sitio web que recopilaba milagros eucarísticos de todo el mundo, convencido de que “la Eucaristía es la autopista hacia el cielo”. Su muerte por leucemia fulminante lo convirtió en un testimonio de fe precoz. Beatificado en Asís en 2020, fue llamado el primer “beato millennial”.

Italia: investigan la denuncia sobre la venta ilegal de reliquias de Carlo Acutis, futuro santo

El próximo domingo, en Roma, será el Papa León XIV quien lleve adelante la ceremonia de canonización, tras la postergación generada por el fallecimiento del papa argentino en abril. El propio Francisco había aprobado la construcción del templo en Mendoza, gesto que reforzó el simbolismo de este proyecto.

Otro “santo joven” será canonizado junto a Acutis

El próximo domingo el papa León XIV también proclamará santo a Pier Giorgio Frassati, quien es recordado como el “santo de los jóvenes”.

Frassati nació en Turín en 1901, en el seno de una familia acomodada e influyente, sin embargo él eligió un camino marcado por la austeridady el servicio. Estudiante de ingeniería en minas, buscaba “bajar al subsuelo” para conocer la vida de los trabajadores y estar cerca de quienes sufrían. Pier Giorgio asistía a misa diariamente y dedicaba su tiempo libre a visitar a los más pobres. Falleció en 1925, a los 24 años, víctima de una poliomielitis fulminante que contrajo mientras asistía a personas enfermas. San Juan Pablo II lo beatificó en 1990, presentándolo como “el hombre de las ocho bienaventuranzas”. Desde entonces, se convirtió en un referente para jóvenes católicos en todo el mundo, especialmente en encuentros como la Jornada Mundial de la Juventud.