El “pacto de Olivos” entre Carlos Menem y Raúl Alfonsín derivó en la reforma constitucional de 1994. Quedó habilitada allí la reelección presidencial -con pista libre para el riojano-, mientras se ampliaba la Cámara de Senadores incorporando un representante más por provincia -lo que beneficiaba la supervivencia parlamentaria y electoral del radicalismo-. Además, tal como lo había dispuesto la efímera Constitución “peronista” de 1949, los senadores pasarían a elegirse por voto directo. Antes, esa era potestad de las legislaturas provinciales.
Pues bien, Menem obtuvo su ansiada reelección en 1995, cuando el 1 a 1 de la Convertibilidad cotizaba alto. Pero ya en ese momento los efectos negativos del plan económico empezaban a percibirse, al igual que la avalancha de casos de corrupción que involucraban a figuras del Gobierno.
El escenario fue propicio para la conformación de un nuevo frente, la Alianza, donde confluyeron la UCR, peronistas disidentes y sectores progresistas nucleados en el Frepaso. La elección de medio término del 26 de octubre de 1997 fue el debut de la Alianza y lo hizo a lo grande, ya que a nivel nacional se impuso al PJ por paliza: 46,% a 36,3%.
Claro que en Tucumán, gobernada en ese momento por Antonio Bussi y su Fuerza Republicana (FR) era otro el cantar, al punto de que logró una victoria holgada (42,7%) y se alzó con dos de las bancas que se renovaban en la Cámara de Diputados. Fueron para Ricardo Bussi y Delia Pinchetti.
Segundo quedó el peronismo (26,6%), llevando al Congreso al histórico dirigente Amado Juri, quien había sido gobernador entre 1973 y 1976. Juri falleció en el ejercicio del cargo en octubre de 2000 y lo reemplazó Edmundo Robles Ávalos. El cuarto escaño fue de la Alianza (16%) y lo ocupó Alfredo Neme Scheij.
Otra historia
Las cosas habían cambiado por completo cuando se celebraron las siguientes elecciones de medio término, el 14 de octubre de 2001. Al país lo gobernaba la Alianza (Fernando de la Rúa), y a Tucumán, el peronismo (Julio Miranda). Eran las vísperas del incendio en la Argentina y eso quedó reflejado en la derrota del oficialismo a nivel nacional: 22,7% contra el 36,4% del peronismo.
Julián Murga: un soldado al CongresoTucumán elegía tres diputados y tres senadores. A la Cámara Baja fueron Roque Tobías Álvarez, José Ricardo Falú (por distintas facciones del peronismo) y Ricardo Bussi (FR, renunció en 2003 y lo reemplazó Francisco Torres). Y para el Senado fueron elegidos José Alperovich, Malvina Seguí (por el oficialismo “mirandista”) y Pablo Walter (por el bussismo).