Luego del 0-1 ante Flamengo en Brasil, Gustavo Costas enfrentó los micrófonos y mostró un discurso cargado de optimismo. Agradeció a los hinchas por su apoyo y aseguró que Racing está más vivo que nunca de cara a la revancha.
El entrenador se negó a criticar al árbitro por el gol anulado a Santiago Sosa, aunque admitió no entender la decisión. Remarcó el esfuerzo del plantel, diezmado por lesiones, y valoró el carácter con el que afrontaron el duelo.
Dijo estar orgulloso de sus futbolistas, destacando que muchos jugaron al límite físico y que dejaron todo en la cancha. También elogió la tarea de Facundo Cambeses, figura del encuentro, quien “esperó su momento y hoy demuestra por qué llegó a la Selección”.
El mensaje que ilusiona al hincha
Costas reconoció la diferencia económica entre los clubes, pero resaltó que sus jugadores tienen algo que el dinero no compra: hambre de gloria.
“Nos faltan 90 minutos, ojalá que agreguen ocho si hace falta”, cerró el DT, en una frase que encendió la ilusión en Avellaneda. “Con nuestra gente en el Cilindro, va a ser otra historia”.