En la Quinta Agronómica, más específicamente en las facultades de Arquitectura, Exactas y Económicas, hay un murmullo constante que desde este miércoles suena distinto. Si uno escucha con atención, pueden oírse acentos e incluso idiomas variados. Si mira a su alrededor, puede ver banderas de otros países y credenciales con nombres no habituales. Y si uno respira hondo, puede respirar el entusiasmo y la curiosidad de los casi mil jóvenes universitarios de Argentina y de otros países, como Brasil, Bolivia, Chile, Paraguay y Uruguay.

De esta manera, inicia la semana más intensa del año para la UNT, que desde ayer y hasta mañana es sede de la 32° Jornadas de Jóvenes Investigadores (JJI) de la Asociación de Universidades Grupo Montevideo (AUGM), con el lema “La educación y la ciencia transforman realidades”.

Durante los tres días, habrá exposiciones orales, muestras artísticas y encuentros interdisciplinarios distribuidos en 42 áreas temáticas, desde la biotecnología hasta la filosofía. “Lo importante es que los jóvenes no solo muestran sus avances, sino el impacto que sus proyectos tienen en la comunidad”, destacó en diálogo con LA GACETA Gustavo Santamarina, secretario de Relaciones Internacionales de la UNT.

VALIJAS LLENAS DE CONOCIMIENTO. Jóvenes del Cono Sur llegaron a Tucumán para mostrar que la ciencia también se hace con pasión, colaboración y sueños compartidos. / LA GACETA

Historias que inspiran desde Paraguay

Entre los más de 900 participantes, las historias se entrelazan y revelan el espíritu de las jornadas. “Este viaje fue un sueño cumplido. Hace dos años intenté venir y no se dio. Hoy estoy acá gracias a mi tutora, y es un orgullo representar a mi país”, contó Dyrce Maldonado (29), de la Universidad Nacional de Concepción (Paraguay). Su investigación analiza la adopción tecnológica en las MiPyMEs paraguayas. “Aún hay brechas digitales enormes. Mi meta es que más jóvenes se animen a investigar, sin importar el área”, expresó.

Entre los asistentes más jóvenes está uno de sus alumnos, Sebastián Nicolás (19) estudiante de Administración. Él presentará un trabajo sobre uso de inteligencia artificial en la educación universitaria. “Empecé a investigar en el colegio y me enamoré del proceso. Hoy estar acá me hace sentir orgulloso de lo que somos capaces de hacer desde lugares pequeños”, contó. Para él, el contacto con otros jóvenes investigadores es tan valioso como el trabajo mismo. “Uno aprende mucho más allá del aula. Ver cómo piensan los demás, escuchar sus experiencias, te abre la cabeza”, reflexionó.

DE PARAGUAY. Los jóvenes comparten las remeras que les regaló la directora de su investigación. / LA GACETA

Grandes mentes de Chile

A unos metros está Gustavo Varela (24), quien vino a presentar su proyecto de investigación del magíster en Ingeniería Química en la Universidad de Santiago de Chile. El joven resumió la experiencia con humor y asombro: “Estoy más nervioso por el vuelo que por exponer mi trabajo”, bromeó. “Pero vale la pena. Llegar a otro país y ver tanto verde, tanta gente con las mismas ganas, te renueva. Esto te hace querer seguir, hacer un doctorado, crear algo propio”, destacó.

DE CHILE. Desde hongos antárticos hasta tecnología láser, los jóvenes de la delegación de Chile presentan sus proyectos en las Jornadas de Jóvenes Investigadores de la UNT. / LA GACETA

A su lado está Nicolás del Valle (26), estudiante de ingeniería física y trabajador de una óptica láser, quien investiga cómo democratizar esta tecnología con métodos accesibles. “Mi proyecto busca medir el perfil de un láser con un presupuesto de cinco dólares. Es una forma de demostrar que la ciencia puede ser inclusiva, que no hace falta tener millones para innovar”, detalla. Su investigación fue refinada a partir de su participación en la jornada anterior, que fue en Uruguay.

De la misma delegación pero de la Universidad de Chile es Elisa Peromarta (25), estudiante del Magíster en Bioquímica de la Facultad de Ciencias Químicas y Farmacéuticas de la Universidad de Chile, vino a Tucumán desde Brasil, donde estuvo realizando una estancia académica de más de tres meses en la Universidad Estadual Paulista (UNESP), campus Río Claro. En esta jornada presentará trabajo sobre hongos antárticos y solventes biodegradables. “Los hongos producen pigmentos únicos, pero su extracción suele ser contaminante. Buscamos hacerlo de forma ecológica, con solventes reutilizables. Es ciencia con impacto real”, explicó.

Ella apenas llegó pero ya consiguió el contacto de una argentina que estudia los hongos desde la literatura, una perspectiva que le gustaría integrar a su investigación. "Estos espacios son para eso, crecer y construir comunidad", remarcó. Las Jornadas de Jóvenes Investigadores cierran el jueves con una ceremonia en la que la UNT pasará la posta a la próxima universidad anfitriona. Pero el mensaje ya está claro: La educación y la investigación son las herramientas más poderosas para transformar realidades. Y eso se ve en cada uno de los participantes.