En los últimos años es habitual que se informe que una tormenta solar va a llegar a la Tierra y que, alguna muy intensa, podría causar distintos problemas en las redes eléctricas o las comunicaciones. Esto es posible porque ha mejorado la tecnología con que se observa al Sol. Los nuevos satélites ayudan a conocer mejor su funcionamiento y su estructura. Hay que recordar que las tormentas solares afectan el campo magnético y la atmósfera terrestre, produciendo auroras polares, entre otras cosas.

Hace pocos días se produjeron auroras polares muy intensas, que se vieron hasta latitudes relativamente bajas. Fueron causadas por una tormenta solar muy intensa que no fue detectada

Sólo por sus efectos

¿Por qué no se la detectó? ¿Los satélites fallaron? Las tormentas solares ocurren cuando el Sol emite partículas y radiación, causadas por lo que se llama Emisiones de Masa de la Corona Solar (CME es su sigla en inglés), las que producen erupciones (flares) y arcos que son detectadas por los satélites y los telescopios solares terrestres. Para ello se tapa el disco solar y se ven estos eventos que emiten luz visible y ultravioleta.

Hay algunos CME que no producen emisiones visibles y no pueden ser detectadas por los instrumentos habituales. Estos se llaman Emisiones de Masa Coronal Furtivos (Stealth CME). Son eventos muy lentos y solo se pueden detectar por sus efectos sobre la atmósfera terrestre. Un evento de este tipo es el que habría producido la tormenta reciente que no se detectó. Se cree que el 20% de las tormentas solares son furtivas, es decir, no detectables con los instrumentos habituales.

Los ciclos

El Sol tiene ciclos de 11 años en el que la actividad aumenta y disminuye. El ciclo solar actual ya alcanzó su máximo y la actividad está comenzando a disminuir. Las próximas tormentas solares serán más débiles y menos frecuentes, las CME furtivas serán más difíciles de detectar porque sus efectos en la atmosfera terrestre serán más débiles.

Hay satélites que miden el campo magnético solar. Hay astrofísicos solares que proponen que los CME Furtivas se originan en las zonas en donde el campo magnético es más intenso y podrían predecirse si se las puede identificar.

Esta es una propuesta muy reciente. Hay que realizar muchas observaciones y desarrollar modelos para poder identificar los lugares con campos magnéticos intensos y verificar que allí se originan los CMD Furtivos. No es seguro que esto pueda funcionar, pero es una muy posibilidad de que se los pueda detectar antes de que su efecto pueda llegar a la Tierra, por lo que es importante seguir trabajando en ello. Esta es la forma de trabajar en ciencia, no se descarta una propuesta hasta que verificar que no es útil.