ABBOTTABAD/NUEVA YORK/FORT CAMPBELL.- Al Qaeda confirmó ayer la muerte de su líder, Osama Bin Laden, despejando así parte de la confusión en torno al operativo contra el llamado "guerrero santo", y prometió conducir más ataques contra Occidente.
El anuncio de la red islamista, que dijo que difundirá pronto una cinta de audio de Bin Laden grabada una semana antes de su asesinato, seguramente aliviará las dudas de muchos que cuestionaban si realmente había muerto. Del sondeo realizado en www.lagaceta.com.ar, el 65,2% de 1.385 participantes no cree en el final de Osama y sólo el 21,66%, que falleció. El 13,14% no se decidió.
"Su sangre es demasiado valiosa para nosotros y para todos los musulmanes como para ser derramada en vano; permanecerá, con permiso de Alá Todopoderoso, como una maldición que persigue a los estadounidenses y a sus agentes, e irá detrás de ellos dentro y fuera de sus países". Así se pronunció Al Qaeda en un comunicado difundido por internet. Además, instó a los pakistaníes a levantarse contra su Gobierno: "así limpiarán la mancha de vergüenza puesta por una camarilla de traidores y asesinos, y la inmundicia de los estadounidenses que esparcen su corrupción".
"Advertimos a los estadounidenses que no dañen el cuerpo del jeque o lo expongan a algún tratamiento indecente, ni que agredan a algún miembro de su familia, vivo o muerto, y que entreguen los cuerpos a sus familias. Su alegría se tornará tristeza y su sangre se mezclará con sus lágrimas", añadió. La Casa Blanca asegura que los restos de Bin Laden fueron lanzados al mar.
En tanto, en numerosas ciudades de la región árabe hubo ayer manifestaciones en recordación al líder islamita, sin incidentes.
Los Navy Seals
Por su parte, el presidente Barack Obama, que disfruta del aumento de sus índices de aprobación por la muerte de Bin Laden, voló ayer a la base militar de Fort Campbell, para agradecer y condecorar a los comandos involucrados en la incursión en Pakistán.
La visita de Obama, apenas un día después de participar en una sombría ceremonia en la Zona Cero de los ataques del 11-S, en Nueva York, llega en medio de dudas sobre las versiones iniciales del asalto al escondite de Bin Laden en Pakistán. En la base, Obama y los soldados se reunieron en un gigantesco hangar, adornado con banderas. Entre ellos estaba los comandos de la Navy Seals, que entrenaron durante semanas para el asalto del complejo en la ciudad de Abbottabad, cerca de Islamabad.
"Han hecho un trabajo excelente", dijo Obama. "No hay mejor prueba de ello que la muerte de Osama Bin Laden", afirmó. (Especial, Reuter y Télam)