GOLD COAST, Australia.- “Los Pumas están buscando establecerse en el torneo y lo han hecho. Se han ganado el respeto”, dijo Robbie Deans, entrenador de los Wallabies, luego del partido y un poco más tranquilo con el 23-19 final, luego de que Los Pumas pusieran a los anfitriones contra las cuerdas, en su propia casa , en el Skilled Park, de Gol Coast.
Por su parte, los jugadores que enfrentaron a los argentinos en el campo, fueron más crudos con sus opiniones sobre sus rivales. “Fue un infierno, los 'argies' jugaron un partido muy físico y fueron muy duros. Los Pumas son grandes y golpean duro”, resaltó el segunda línea debutante Kane Douglas.“Ellos son lgrandes y golpean realmente duro en los rucks. Fue sin duda un paso adelante respecto a Super Rugby”, agregó el segunda línea de Waratahs.
“Nos pusieron bajo presión”, añadió el experimentado Nathan Sharpe, el nuevo capitán del equipo, que comentó cómo sintió el partido. “Argentina es un equipo muy difícil. Aprovechan sus oportunidades y nos pusieron bajo mucha presión”, dijo.
Digby Ioane, elegido como el hombre del partido, también se sumó y contó sus sensaciones: "Fue un partido frustrante, pero una victoria es una victoria. Argentina hizo trabajó bien en la ruptura, pero todos hicieron su trabajo en el segundo tiempo y se acercó en el resultado”.
Pasaron Los Pumas por Australia y, como pasó ante Sudáfrica y ante Nueva Zelanda, los Walabies tampoco pudieron sumar el punto bonus. Como dijo el técnico australiano, Los Pumas se ganaron el respeto y demostraron que están listos para jugar en el torneo más duro del planeta. (Olé y Especial)