ESTAMBUL/BEIRUT/DAMASCO.- Los rebeldes sirios anunciaron que expulsaron a las tropas leales a Bashar al Assad del importante puesto de control de Harim, en la frontera con Turquía, lo que le facilitará el ingreso de armas, medicamentos y víveres. Además, hubo fuertes enfrentamientos en las zonas cercanas al aeropuerto de Damasco.
El embajador sirio en Moscú, Riad Haddad, negó que las tropas gubernamentales estén usando armas químicas en la provincia de Homs, y calificó de "completamente falsas" las denuncias de la oposición de que varios militantes murieron por a un gas lanzado por el Ejército.
El enviado especial de la ONU y la Liga Árabe a Siria, Lakhdar Brahimi, se reunió con representantes de la oposición en la capital, en su esfuerzo por encontrar una salida al conflicto que causó más de 42.000 muertos desde marzo de 2011. El lunes, había hablado con Al Assad sobre una transición pacífica en el poder y quiere llegar a un pacto que incluya a Estados Unidos y a Rusia.
El presidente del opositor Consejo de Coordinación Nacional, Hasan Abdelazim, advirtió: "la crisis es muy complicada porque la solución no está solo en manos de los sirios; hay mucha partes involucradas, y es un asunto internacional". Este grupo es tolerado por Al Assad, pero rechazado por las principales fuerzas rebeldes que luchan para derrocarlo, que controlan las milicias armadas. (DPA-Reuters-Télam)