Cuidar las apariencias. No hay grandes secretos. Cuando una oportunidad laboral se presenta, los detalles cuentan. Los selectores suelen observar más las actitudes que las aptitudes al momento de iniciarse el proceso de selección. Pero no sólo hay que prepararse para disputar esa carrera para llegar a la meta. No hay que descuidar la forma en que cada postulante se presenta, ya sea a través del papel como también de las redes sociales. "Las oportunidades laborales no contemplan segundas partes cuando se trata de dar una buena primera impresión", advierte Pedro Rojas, experto en Social Media y Selección 2.0.
En su blog www.seniorm.com, el especialista español detalla tres errores que son muy frecuentes al momento de presentarse en una entrevista. "Como captador y seleccionador de personal, estoy acostumbrado a encontrar errores y omisiones de todo tipo por parte de los candidatos que aplican a las ofertas que publico; la mayoría de esos errores están relacionados con la falta de actitud durante el proceso, así como en la forma en que redactan sus perfiles en la red y los currículum de siempre", indica.
"Se trata de errores que los autodescartan y que me obligan a no considerar sus candidaturas, aunque esos fallos no estén del todo ligados a las responsabilidades del cargo o sus funciones", remarca. En particular, Rojas expone tres errores más notorios:
- Errores ortográficos, faltas de acentuación y omisión de signos de puntuación.
"Sigo sin entender la minimización que la mayoría de las personas hace de la mala ortografía cuando se les llama la atención sobre este particular. Las veces en las que he intentado darle la importancia que merece al hecho de escribir correctamente, me he encontrado con candidatos a los que les digo que parte de su trabajo consistirá en redactar "bien" y que su currículum me indica que no podrán conseguirlo que me han respondido: total... ¡por dos acentos no es para tanto!... Lo que termina por hacerme decidir que no es la persona que buscaba", relata el experto.
Aunque los errores ortográficos parezcan aspectos menores en un candidato, son verdaderas señales de "peligro" que alertan a los seleccionadores; ya que no sólo denotan desconocimiento del lenguaje, sino falta de atención a los detalles. La mejor forma de evitar estos errores, sugiere el especialista, es realizar un cursillo o buscar un texto que complemente lo aprendido en el colegio, por mucho que puedan ayudar los correctores de texto, la ortografía se sabe o no se sabe. Pero si no tienes tiempo por estar inmerso en un proceso de selección, busca que alguien más revise lo que hayas escrito, al menos de momento estarás cubierto. - No ir más allá de la oferta de trabajo. "Sigo entrevistando candidatos que no tienen ni idea de la empresa para la que están aplicando, que no saben nada de lo que hacemos o que no saben en cuál sector nos movemos", indica Rojas. Es imperativo que cualquiera que intente aplicar a una oferta de empleo realice una breve investigación sobre la empresa, sobre sus objetivos, su misión y otros aspectos que se muestran en la web de la compañía; incluso ir más allá y buscar que aparece en Google al colocar el nombre de la empresa. Este simple hecho es vital para ir a una entrevista y tener éxito durante la misma, ya que coloca al candidato en ventaja. Aquí queda muy bien incluir la frase: "la información es poder".
- No darle importancia a una buena "biografía" en redes sociales.
Uno de los factores que más hace desestimar o seguir con una candidatura es lo que el candidato ha plasmado en su biografía en redes sociales. Si no es lo suficientemente descriptiva, si la foto o su contenido no están acordes a lo que ofrece como candidato o si está redactada a la ligera, lo más probable es que desista en ahondar sobre esa persona, indica el selector. "Es tan fácil plasmar en pocas palabras y en una simple imagen la esencia de lo que una persona desea mostrar, que sigo sin entender que alguien que aplica para una oferta de trabajo, no tome en cuenta este factor tan relevante", añade.
Al redactar una biografía para una red social, sólo hay que pensar y definir en el tipo de imagen que se desea reflejar, para entonces poder enfocar la descripción sobre aspectos que llamen la atención del seleccionador o le puedan interesar.
Rojas aconseja no descuidar lo más básico de la información personal cuando se está en un proceso de búsqueda de empleo o de cambios profesionales. "Los candidatos se enfocan en otros aspectos que consideran más importantes, descuidando lo esencial", finaliza.