BUENOS AIRES.- Miguel Angel Brindisi se convirtió anoche en el nuevo entrenador de Independiente, después de haberse negado a aceptar el cargo en horas de la tarde. El DT se reunió con el presidente Javier Cantero en Puerto Madero y decidió darle una mano al club de Avellaneda, al que llevó al título en el torneo Clausura de 1994 y en la Supercopa y la Recopa del mismo año.
Brindisi, de 62 años, dirigió por última vez en 2011, cuando estuvo a cargo del plantel superior de Huracán. Y ahora vuelve a Independiente, para intentar el milagro de mantenerlo en Primera división.
De esta manera terminó una breve novela que por la tarde, además de al ex volante de Huracán y Boca Juniors, tuvo como protagonistas a Jorge Fossati y Enzo Trossero, quienes no aceptaron la propuesta del elenco de Avellaneda.
"En este momento estoy en otra etapa de mi vida y también con posibilidades de dirigir en el exterior. Hay que estar al 1.000 por ciento para dirigir a Independiente en estos momentos y yo no estoy en esas condiciones", afirmó Brindisi en horas de la tarde. Luego de marcha atrás con su decisión.
Antes, el primero en bajarse fue Enzo Trossero, quien se mostró muy enojado con Cantero. "No tuvo tiempo para llamarme a mí, pero sí lo tuvo para hablar con otros. Me hubiese gustado reunirme con Cantero, a quien no conozco. Nunca hablé ni por teléfono ni personalmente. Cuando llegué a la reunión, me aclararon que estaban hablando con otros", dijo. (DyN)