BUENOS AIRES.- El debate empezó caliente. La diputada Elisa Carrió pidió una cuestión de privilegio contra Diana Conti y denunció que la carta que envió a la Cámara baja el presidente de la Corte Suprema, Ricardo Lorenzetti, no había sido distribuida entre los diputados presentes. La titular de la comisión de Asuntos Constitucionales le contestó con acidez y una chicana.
"Este esconder las modificaciones, perturbar el trabajo de los diputados, tenía un objetivo: significaba no sólo esconder a los diputados nacionales, sino también a muchos camaristas federales el contenido de la carta y de las reformas", señaló la líder de la Coalición Cívica.
Por eso, y por "respeto que merece cualquier diputado más allá del bloque al que pertenece", Carrió pidió la medida contra Conti. La diputada kirchnerista recordó que fueron diputados opositores quienes armaron la lista de oradores de ayer y le dijo que la lengua, "que la tiene larga y filosa para injuriar a la República, a la democracia y a la representatividad, se la meta justo en el lugar donde va a quedar cajoneada la cuestión de privilegio".
"Ayer la diputada Carrió, en los canales de televisión, insultó a todos los diputados oficialistas y aliados, diciendo que ya no servimos ni siquiera para elaborar una modificación en un cambio legal", fustigó. LA GACETA