Continúa hoy, desde las 9.30, el juicio oral y público que se desarrolla en Tucumán por crímenes cometidos desde 1975 y durante la dictadura, conocido como megacausa "Arsenales II y Jefatura II". El viernes pasado terminaron de escucharse los testimonios de víctimas de la Jefatura de Policía, por lo que esta semana comenzará la parte del juicio que corresponde al centro clandestino que funcionaba en el Arsenal Miguel de Azcuénaga.
Para esta mañana están citadas a declarar Liliana Vitar -actualmente jueza penal-, quien integró la Comisión Bicameral que registró denuncias sobre secuestros y desapariciones. Vitar fue asesora de la comisión bicameral que investigó los delitos de lesa humanidad cometidos durante los 70.
La bicameral recibió 487 denuncias de liberados y familiares de desaparecidos en Tucumán, entre marzo de 1984 y abril de 1985.
"La comisión concluyó que hubo un plan sistemático llevado a cabo por todas las fuerzas armadas", resume Vitar.
También se escuchará la exposición de Mirta Mántaras, abogada patrocinante de víctimas y familiares de desaparecidos, que integró el consejo de la Asamblea Permanente por los Derechos Humanos, y autora del libro "Genocidio en la Argentina".
Está previsto que mañana empiecen a declarar testigos que estuvieron secuestrados en el Arsenal.
El proceso, a cargo del Tribunal Oral en lo Criminal Federal de Tucumán, integrado por los jueces Carlos Jiménez Montilla, Gabriel Casas, Juan Carlos Reynaga y Hugo Cataldi, comenzó el 12 de noviembre y en él son juzgados 41 acusados, entre los cuales hay dos mujeres.
De los 41 imputados, ocho participan de las audiencias por videoconferencia desde el hospital penitenciario de Ezeiza y 32 concurren en forma presencial desde el lugar donde se encuentran detenidos, la unidad penitenciaria de Villa Urquiza, y otro lo hace desde su domicilio, por estar detenido con prisión domiciliaria.
Quince son ex militares, seis son ex gendarmes, 16 son ex policías de la provincia de Tucumán, uno es sacerdote, otro es escribano y otro, personal civil del Ejército. LA GACETA