BUENOS AIRES.- Los gobiernos de Argentina y Brasil negocian los términos para una prorroga del acuerdo automotriz común que regula el intercambio comercial, en tanto Buenos Aires flexibilice el control a las importaciones. Así lo indicó el economista argentino con residencia en San Pablo, Gustavo Segré, quien consideró que Argentina se convirtió en un "ancla" para el desarrollo del país vecino.
La visita relámpago que realizó en la víspera el ministro de Desarrollo del Brasil, Fernando Pimentel, trajo la posición de su país de levantar todas las restricciones permanentes o transitorias para el libre tráfico comercial entre ambos países. Pimentel dejó en claro que el futuro del comercio bilateral de automóviles depende del "espíritu de respetar el mercado común", según manifestaron voceros vinculados a las negociaciones.
El acuerdo que vence a fin de mes organiza el intercambio comercial del sector a la vez que sirve de faro para las inversiones que deciden las casas matrices de las empresas. Actualmente estipula que por cada 1,95 dólar que importa la Argentina de Brasil, le puede exportar 2,5, aunque en rigor, el intercambio real es de 1,2. Por ello, ambos gobiernos tienen previsto prorrogarlo por 18 meses, con la idea de lograr un nuevo esquema en el que el denominado "flex" se aproxime mas a la realidad. En tanto, Segré señaló que Pimentel seguramente pidió en la reunión que mantuvo el lunes en Olivos con la presidenta Cristina Fernández que "no se detengan" más productos de ese país colocados en la Argentina.(DyN)