BUENOS AIRES.- El ex preso político de La Rioja Raúl Olivera ratificó ayer su denuncia contra el titular del Ejército Argentino, el general César Milani, por su participación en la dictadura militar y afirmó que "es un represor y tiene que ser relevado". Mientras tanto, más políticos opositores reclamaron el desplazamiento del uniformado.
Olivera reiteró que Milani participó del interrogatorio al que fue sometido durante su detención ilegal, en la última dictadura, en el que, recordó, que "lo apretaron" y hasta le realizaron un "simulacro de fusilamiento". "Más allá del trasfondo político que pueda haber, yo creo que ese hombre no tiene que estar al frente del Ejército y que es un represor", remarcó Olivera.
En cambio, la presidenta de Abuelas de Plaza de Mayo, Estela de Carlotto, advirtió que si la Justicia consigue "pruebas suficientes contra" el titular de la Fuerza, "inmediatamente tiene que ser removido de su cargo", pero aclaró que hasta ahora no tiene "antecedentes" que lo vinculen con la represión en la última dictadura.
Al respecto, la candidata a diputada del Frente Progresista bonaerense Margarita Stolbizer consideró que las titulares de Madres y Abuelas de Plaza de Mayo, Hebe de Bonafini y Estela de Carlotto, deberían ponerse al frente del reclamo de investigación de las denuncias que involucran a Milani. "Ellas son referentes fundamentales en la lucha por la defensa de los derechos humanos y siempre han condenado el pasado de los militares inculpados con la represión. Ahora también deben ellas manifestarse a favor del esclarecimiento y de los pedidos de apartamiento para el cargo", argumentó.
Con ella coincidió el presidente del bloque de diputados nacionales de la UCR, Ricardo Gil Lavedra, quien afirmó que las denuncias contra el jefe militar no requieren "mayor esclarecimiento" y remarcó que, por ello, "hay que apartarlo" del cargo. "Más allá de las denuncias sobre su participación en la represión ilegal en la década del '70, lo cierto es que este hombre se encuentra seriamente sospechado; es decir, las sospechas que hay sobre él son fundadas", insistió el radical.
En tanto, el diputado del GEN Gerardo Milman y su par radical Miguel Bazze pidieron que el ministro de Defensa, Agustín Rossi, concurra al Congreso para informar sobre los antecedentes de Milani. Milman afirmó que la designación de Milani "es la consagración de la impunidad de un partícipe en la dictadura genocida" y expresa "una lógica coherente" con otras iniciativas del Gobierno.
Otro de los dirigentes de la oposición que reclamó la renuncia del jefe del Ejército fue el candidato a diputado nacional por Autodeterminación y Libertad Luis Zamora, quien reclamó que Milani sea "destituido en forma inmediata" por el Gobierno nacional. "Los antecedentes de Milani vinculados al genocidio de la dictadura del '76, su relación con el levantamiento carapintada de 1987 y sus tareas de inteligencia en todos estos años, son suficientes", planteó Zamora.
En medio de la polémica, los diputados Fernando Solanas y Elisa Carrió presentaron una denuncia contra Milani por los presuntos delitos de enriquecimiento ilícito y violación de los deberes de funcionario público.
La denuncia se basó en el informe que emitió el domingo el programa "Periodismo Para Todos", de Canal 13, que reveló que Milani compró en 2010 una casa de 1.150 metros cuadrados en el barrio La Horqueta, de San Isidro, por $ 1,5 millón cuando el valor de mercado sería de unos $ 2,6 millones.
Por su lado, el senador radical Gerardo Morales pidió ayer, a la Comisión de Acuerdos del Senado, que cite al titular del Ejército a una audiencia en el Congreso, para el 24 de julio, para profundizar el estudio y análisis de su pliego de antecedentes.
Morales, quien es vicepresidente de la Comisión de Acuerdos, envió una nota dirigida a su titular, el kirchnerista Marcelo Guinle para realizar el pedido. (DyN)