De menor a mayor fue el rendimiento de Nueva Zelanda. Se dio el gusto de ganarle a China y obtener un meritorio quinto puesto, cuando su desempeño en la primera fase lo candidateaba para el último lugar.
La muy oportuna Kayla Sharland fue la artífice del triunfo, ya que anotó el único gol del partido en la mitad del segundo tiempo, justo el día en que cumplió 200 partidos con las “Black Sticks”.
En el balance de los 70 minutos fue un triunfo merecido para las oceánicas, que contaron con las mejores chances pero encontraron dificultades para superar a la arquera Dongxiao Li. Sharland (que a su regreso se casará con el All Black George Whitelock) probó varias veces, hasta que uno de sus misiles terminó en la red.