ROMA.- Con la idea de aprovechar el brillo y el peso político internacional que tiene la figura papal, consolidada porque acaba de cumplir el primer año de gestión, el Vaticano será sede hoy -más precisamente la residencia de Santa Marta- del tercer encuentro, durante el último año, entre el papa Francisco y la presidenta, Cristina Fernández.
La jefa de Estado arribó ayer a las hora local (7 horas de la Argentina) al aeropuerto internacional de Ciampino, y luego se trasladó hasta el hotel Eden, lugar donde se hospeda, ubicado a metros de la histórica avenida Vía Veneto, en el barrio romano de Trevi.
El viernes, el secretario de Culto, Guillermo Olivieri, adelantó detalles sobre la visita al Papa: “el encuentro será a agenda abierta, a solas. Charlarán sobre lo que consideren necesario”. Se especuló que también podrían abordar el caso Malvinas.
A las 12 (8 hora argentina), Cristina fue recibida en las puertas del edificio por algunos trabajadores del Eden -entre ellos el cocinero, que se acercó especialmente a la entrada del establecimiento para saludarla- quienes le entregaron a modo de bienvenida un ramo de rosas rojas en nombre de todo el personal. Junto con la Presidenta arribaron también el canciller Héctor Timerman; Olivieri, y el secretario de Comunicación Pública, Alfredo Scoccimarro, quienes también saludaron a los trabajadores del hotel, especialmente a Walter, uno de los mozos, de nacionalidad argentina y afincado en Roma desde hace más de 20 años. Durante la recepción también estuvieron presentes las autoridades argentinas que residen en Roma: el embajador ante Italia, Torcuato Di Tella; el agregado económico, Guillermo Moreno; y el representante argentino ante el Vaticano, Juan Pablo Cafiero.
El canciller destacó el valor de la relación que tiene el gobierno argentino, en especial la primera mandataria, con el Sumo Pontífice.
Timerman se reunirá con el secretario de Estado del Vaticano, cardenal Pietro Parolin. Designado en su cargo por Francisco, en octubre de 2013, y nombrado cardenal durante el mes pasado, Parolin fue antes nuncio apostólico en Venezuela durante cuatro años (2009-2013), época en la que mantuvo muy buena relación con el fallecido ex presidente Hugo Chávez Frías.
Luego de la cita de ambos ministros de Relaciones Exteriores, tendrá lugar en la residencia de Santa Marta la reunión entre Cristina y el Papa, tercera desde que Jorge Mario Bergoglio fue elegido como titular de la Iglesia Católica.
En París
Por su parte, después de reunirse con el Papa, la presidenta de la Nación tiene previsto viajar a Francia, invitada por el primer mandatario de ese país, Francois Hollande, para visitar la capital gala y concurrir al Salón del Libro de París, donde este año la Argentina es invitada especial. (Télam)
El primer encuentro entre Cristina Fernández y el papa Francisco sucedió el 18 de marzo del año pasado, en el Vaticano, cinco días después de la elección como Papa del ex arzobispo de Buenos Aires, y un día antes de la misa de entronización como obispo de Roma y jefe del Estado Vaticano. En aquella reunión, que consistió en un almuerzo, no sólo intercambiaron regalos (Cristina le entregó un juego de mate de plata), sino que la mandataria le pidió su “intermediación” en el pedido de diálogo a Gran Bretaña por la soberanía argentina sobre las Malvinas. Cuatro meses más tarde, el 28 de julio, Cristina y Francisco coincidieron en Río de Janeiro, en el marco de la “XXVIII Jornada Mundial de la Juventud”. Posteriormente, en octubre de 2013, el Papa le envió un telegrama a la Presidenta -recién operada de un hematoma subdural- para desearle el “total restablecimiento de su salud” y pidiéndole a la Virgen “que la fortalezca para que pueda volver a sus tareas”. Cristina, que fue la primera mandataria recibida por Francisco durante su papado, será también la primera jefa de Estado en reunirse con él tras cumplirse la semana pasada el primer año de pontificado. (Télam)