El gobernador, José Alperovich, había admitido la semana pasada culpas del Poder Ejecutivo en el tratamiento de la revuelta policial de diciembre, que acabó en una ola de saqueos en toda la provincia. El radical Federico Romano Norri, sin embargo, cree que las disculpas del mandatario llegan tarde. “Cuatro meses pasaron para que el gobernador admita que debería haber evitado el paro policial que dejó a los tucumanos sin Estado durante 48 horas. Vale el reconocimiento, pero resulta tardío e insuficiente. Nosotros sostenemos que hay que cambiar el ministro y al secretario de Seguridad. Ellos son responsables políticos por los graves hechos sucedidos, pero también sobre las caras visibles de los fracasos en materia de seguridad pública que tienen en vilo a la mayoría de los tucumanos”, aseveró el legislador. El opositor lamentó que el oficialismo siga evitando el debate legislativo sobre los problemas de inseguridad. “El gobernador nos pidió proyectos, se los presentamos. Pedimos la interpelación del ministro y la evitaron. (Jorge) Gassenbauer vino a la Cámara pero sólo se reunió con los oficialistas”, sostuvo Romano Norri.