La sala de prensa del estadio Mineirao está abarrotada. Un enjambre de periodistas llegó a Belo Horizonte para ver Argentina-Irán, pero en especial para seguir de cerca los movimientos de Lionel Messi. Muchos pupitres han quedado vacíos en partidos previos de la Copa del Mundo, aunque este no es el caso. La ocupación es total.
"Sabella tiene que usar el 4-3-3 porque es el sistema que favorece a Messi", opina Andrew Warshaw, un especialista en cuestiones tácticas que trabaja para diversos medios británicos. "Argentina no puede sufrir contratiempos contra Irán, pero más adelante se verá cómo evoluciona el equipo -añadió-. De lo que estoy seguro es de que Messi está listo para ir al rescate cada vez que haga falta, como lo hizo contra Bosnia".
Takeshi Tanaka, del canal japonés NTV, integra un equipo que analiza a Messi y a Neymar en cada partido. "Creemos que la final será Brasil-Argentina y por eso realizamos este trabajo especial -apuntó-.Argentina le tiene que ganar a Irán por goleada, y al final del Mundial se verá quién es el mejor jugador, si Messi o Neymar".
A Gavin Hamilton, de la revista inglesa "World Soccer", lo sorprende el bajo nivel que exhibió Messi durante los últimos meses en Barcelona. "Pero ahora se lo ve físicamente muy bien -estimó-.Para él es importante que Argentina se mantenga mentalmente fuerte como equipo. De eso dependerá su futuro en el Mundial".