WASHINGTON.- La operación diseñada por responsables del Departamento de Defensa estadounidense contra la milicia extremista Estado Islámico de Irak y Siria (ISIS) podría durar hasta tres años, publica el “New York Times”. El periódico cita a funcionarios del gobierno que hablan de un plan de tres pasos: la primera fase ya ha comenzado con los bombardeos aéreos actuales en el norte de Irak. Una segunda fase buscaría intensificar la formación, asesoramiento y equipamiento de los combatientes kurdos (peshmergas) y del Ejército iraquí. Finalmente, en un tercer momento se buscará destruir al ISIS dentro de Siria.
Toda la operación podría extenderse hasta 36 meses y estar terminada una vez haya culminado el mandato del presidente Barack Obama, señala el periódico.
El Presidente pronunciará mañana un discurso sobre la estrategia para luchar contra los extremistas. Obama insinuó que se trata de una ofensiva más amplia encabezada por Estados Unidos. Sin embargo, insistió en que no enviará tropas terrestres a la lucha contra los yihadistas.
La aviación de Estados Unidos bombardeó posiciones yihadistas dentro de la ciudad de Mosul, por primera vez desde que Washington le declaró la guerra al grupo terrorista que actúa en Irak y Siria. Desde que Estados Unidos decidió hace un mes bombardear posiciones del ISIS en Irak para frenar su avance hacia Erbil, capital de la región autónoma del Kurdistán, los ataques de su aviación se habían limitado a las periferias de la provincia de Nínive, cuya capital es Mosul.
Los bombardeos estadounidenses esta vez se centraron principalmente en Majmur, Sinyar, la represa de Mosul, donde se registraban fuertes batallas.
La formación de un nuevo gobierno en Irak avanzó ayer, pese a una disputa sobre las regiones en el Norte, ya que diputados kurdos exigen al Parlamento concesiones territoriales. Los kurdos quieren la soberanía en las provincias de Kirkuk, Nínive y Diyala, que les pertenecen históricamente, pero son administradas por Bagdad. En las últimas semanas, las milicias peshmerga kurdas defendieron esas provincias contra los ataques del ISIS después de que en junio las tropas iraquíes abandonaron partes del norte de Irak sin enfrentarse a la agrupación terrorista. El primer ministro designado Haider al Abadi logró los votos suficentes para jurar ante el Parlamento, que además eligió al saliente jefe de gobierno, Nuri al Maliki, como uno de los tres vicepresidentes. Así, comienza a resolverse la crisis política que asoló al país en los últimos meses y que permitió el avance yihadista en el Norte. Ayer se produjo un atentado suicida al norte de Bagdad en el que murieron al menos 19 personas.Desconocidos volaron un vehículo Hummer. El ataque fue reivindicado por el ISIS. (DPA-Télam)