Cuando mirás un cartel, un logotipo, una publicidad, un envase... cuando leés un diario, un libro, un folleto, y en cientos de miles de oportunidades más, lo que inunda tus ojos -y tu cerebro- es el trabajo de un diseñador. ¿Qué hace un diseñador gráfico? Programar, proyectar y llevar a cabo comunicaciones visuales: sucinta definición del perfil profesional.

¿Profesión nueva? Depende de cómo se la mire -ya los hombres primitivos utilizaban imágenes para comunicar mensajes-, pero con las características actuales, bastante nueva, sí.

“Vivimos en una sociedad totalmente mediatizada; interactuamos todo el día con pantallas de todo tipo, tamaño y forma. Son los tiempos de la inmediatez de la comunicación, pero, por sobretodo, la era de la imagen -define Germán Luft, director de la carrera en la Unsta-. La imagen es la que transmite el mensaje, la que vende, y la función del diseñador es potenciar el mensaje, lograr impacto”.

Germán sabe de qué está hablando: la carrera que conduce está cumpliendo estos días 20 años y lo están celebrando con una semana de actividades en el Campus de la Unsta (Av. Perón 2085) en Yerba Buena: comenzaron el lunes, y seguirán hasta el viernes, con conferencias por las mañanas, workshops por las tardes y cine por las noches (las “pelis”, en los Cines del Solar, solo terminan esta noche con “Beautiful Loosers)

“Como parte del perfil profesional se trata también de lograr capacidad de gestión”, añade Germán. Dentro de esa capacidad se entrelazan con el manejo de los diferentes lenguajes (tipográfico, fotográfico, audiovisual, textual, entre otros), habilidades como la detección del público destinatario y la comprensión del mercado.

La “Semana 20DG”

En el stand que da la bienvenida a los visitantes, rodeados de las teteras que son el símbolo de la semana, Erick Iglesias Valdez, Julieta Zazzarini y Pablo Martínez Ribó y Santiago Glencross, alumnos del último año, reparten folletos, brindan toda la información necesaria y vuelven a colgar banderines y gruyas que el viento insiste en derribar.

“La carrera cumple las ‘Bodas de Porcelana’”, dice Santiago para fundamentar la elección de “la mascota”. “Cuando se habla de matrimonio, 20 años se asocian a fragilidad, por eso la porcelana. Y a Victoria (Koralsky) -añade mientras presenta a su compañera- se le ocurrió representarla con la tetera de María Elena Walsh”. El diseño de la gráfica de la semana ha sido, como todos los trabajos expuestos, producto del proceso de aprendizaje.

“La tetera original fue variando, proceso que forma parte de la esencia de nuestro trabajo, hasta llegar a estas -señala las que tiene atrás-, que ya forman ‘La familia Rodríguez’”. “Esto que hemos concretado es lo que llamamos ‘soporte gráfico efímero’, que, a diferencia de una imagen corporativa, por ejemplo, nos permiten salir de los parámetros tradicionales, y volar, ser creativos”, sigue entusiasmándose Santiago.

Mientras, Germán apronta todo para una videoconferencia desde Río de Janeiro con “el capo” marketing móvil, Flabio Medeiros... Acercate: todavía queda mucho por ver y aprender.