La eliminación de Boca estaba consumada y el Monumental era una fiesta. Pero el polémico gesto de Andrés Chávez no pasó inadvertido para los reporteros gráficos que cubrieron el desquite de la semifinal de la Copa Sudamericana, que convirtió en finalista a River.
Bautizado por la prensa como el "Comandante", el ex delantero de Banfield se retiró de la cancha con una mirada hacia la hinchada local y un provocativo movimiento de brazos para expresar "frío".