Dardos siguen yendo y viniendo, desde y hacia la Municipalidad de Bella Vista. El ex funcionario Enrique Romero (secretario de Transporte durante el Gobierno de Julio Miranda) le devolvió el guante al intendente de “la ciudad de las palmeras”, Luis Espeche, que había acusado a Romero de “cobrar peaje” a los remises y de oponerse a la ley de los autos rurales porque tenía sus propios intereses.
Espeche había formulado estas declaraciones para contestar la acusación que le había propinado Romero, quien lo había acusado de haber desviado dinero destinado a obligaciones determinadas por ley, entre otros supuestos delitos. El bellavistense negó haber malversado recursos. “Cuando pedimos los $ 2,7 millones (de anticipo financiero al Poder Ejecutivo, en 2006), los destinamos al pago de deudas con sentencia judicial firme”, había explicado.
Romero volvió a cruzarlo, y en ese cruce involucró a más personas. “Él debe mostrar las sentencias firmes y los recibos de pago de esas sentencias firmes. Como tales sentencias y recibos no existen lo acusé de malversación de fondos y de lavado de dinero, junto al senador Sergio Mansilla y a un concuñado (de Espeche), marido de Rosa Romano, hermana de la presidenta del Consejo Deliberante de Bella Vista (Cristina Romano, esposa del intendente)”, acusó Romero.
Luego, el ex funcionario mirandista respondió las acusaciones referidas a su gestión. “En vez de refutar las acusaciones que le hice, me injuria. Fui el único funcionario que denunció tráfico de influencias de intendentes, funcionarios y legisladores, que tenían relación con autos ‘piratas’. Eso está debidamente documentado”, dijo. Sugirió, además, que nunca fue cuestionado durante el desempeño de su cargo. “Si yo hubiese ‘cobrado peaje’, como sostiene Espeche, los primeros en haber levantado la voz habrían sido los dirigentes de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), cosa que no hicieron”, puntualizó.
Romero no se lanzó los dardos sólo contra Espeche. También los apuntó contra el gobernador, José Alperovich. “El ladrón piensa que todos son de su misma condición. Y Espeche es un ladrón, fiel reflejo de la gestión de Alperovich: integran la gestión más corrupta de la historia política de Tucumán”, dijo.
El intendente de Bella Vista está teniendo un fin de año complicado. Además de esta denuncia por presunta malversación de dinero fue señalado por dirigentes de la oposición por otros hechos. El edil radical de esa ciudad Sebastián Salazar -logró un fallo judicial que obliga a Espeche a entregarle los informes de las Cuentas de Inversión 2011, 2012 y 2013- lo acusó por la supuesta desaparición de un camión del municipio. A ello se sumó el legislador Ariel García (UCR), que lo calificó como el encargado de la gestión más corrupta.