La desocupación profundizó la crisis del mercado laboral tucumano. De acuerdo con los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), 2014 cerró con 10.000 desocupados más que 2013 en el Gran Tucumán-Tafí Viejo. La tasa informada por el organismo federal para el principal aglomerado urbano de la provincia fue del 7,5%, casi 2,5% más que en el cuarto trimestre de 2013. Esto implicó que hubo 29.000 personas que no pudieron insertarse al mercado laboral al cierre del año pasado. En 2013, los desocupados totalizaron 19.000 casos.
El informe oficial ha revelado además que, si bien ha crecido la población económicamente activa en el último año (de 383.000 a 392.000 personas), el número de ocupados bajó en un millar: de 364.000 registrados a fines de 2013 a 363.000 al cierre de 2014. Más inquietante que aquel dato es el crecimiento del nivel de subocupación: en 2013 había 17.000 personas que buscan un empleo, pese a tener otro, con el fin de mejorar su situación económica, mientras que a fines de 2014 la cifra subió a 36.000 casos para el área metropolitana tucumana.
El índice de desempleo de Tucumán también es el más alto del NOA, que terminó 2014 con una tasa promedio de desempleo del 6,3%. A nivel nacional, la tasa aumentó a 6,9% en el cuarto trimestre de 2014, mientras que la subocupación creció a 9,1%, lo que significa que 2,7 millones de personas no tenían un trabajo estable en ese período, según se desprende de datos del Indec, informó la agencia DyN. En el cuarto trimestre de 2013 la desocupación era de 6,4% y la subocupación de 7,8%, afectando así 2,5 millones de personas. De esta forma, se observa que durante 2014 cerca de 200.000 personas perdieron su fuente laboral.
Cabe recordar que para las consultoras privadas la actividad económica retrocedió en 2014, mientras que para el Indec fue levemente positiva. La tasa de actividad -calculada como porcentaje entre la población económicamente activa, o sea en condiciones de trabajar, y la población total- se ubicó en 45,2%, inferior al 45,6% de un año atrás. A su vez, la tasa de empleo -calculada como la población ocupada y la población total- se redujo a 42,1% desde el 42,7% que se registró en el cuarto trimestre de 2014.
Esta caída significa que una menor cantidad de personas está ocupada laboralmente respecto de la población total del país (y no respecto de la población económicamente activa, estimada en 18 millones, que solo incluye a determinadas personas discriminadas, por ejemplo, por el rango de edad).