Los grifos continúan secos. Ciudadanos de Yerba Buena sobreviven sin el servicio de agua potable. La situación afecta, principalmente, a quiénes habitan en las zonas altas de la avenida Aconquija y en El Corte, al pie del cerro San Javier.
Los vecinos de los barrios privados El Tipal y Los Cerros -atrás del sector conocido como Lomas de Imbaud-, por ejemplo, seguían sin agua ayer, y sumaban así casi dos semanas de interrupción.
La madrugada del sábado 7 de marzo, la tormenta que afectó a la provincia fracturó en tres partes el acueducto que trae agua desde Anfama, la principal vía de provisión de San Javier, de La Sala, de El Corte y de la parte alta de Yerba Buena, justamente.
Ayer, cerca del mediodía, operarios de la Sociedad Aguas del Tucumán (SAT) proseguían con las tareas de reparación, que incluso estaban siendo verificadas por el gerente de la proveedora, el ingeniero Alfredo Calvo.
“Hay distintos cortes, por lo que el servicio se irá restableciendo de forma paulatina”, precisó Marina Mitelman, vocera de la SAT.