ATENAS.- Grecia reabrió sus bancos ayer y ordenó el pago de miles de millones de euros en préstamos a sus acreedores internacionales, en las primeras señales de un retorno a la normalidad tras alcanzar un acuerdo sobre negociaciones para un nuevo rescate financiero a cambio de reformas.
Numerosos clientes hacían fila fuera de los bancos, que abrieron por primera vez en tres semanas, luego de que las entidades financieras fueran cerradas por el Gobierno para impedir que el sistema colapsara por una ola de retiros de depósitos.
Además, entró en vigor un alza en el impuesto al valor agregado (IVA), estipulado en los términos del rescate, con un incremento del 23% sobre los alimentos y el transporte público, desde un 13% anterior. El mercado de acciones permanecía cerrado hasta nuevo aviso.
Los cierres de los bancos eran la señal más visible de la crisis que había dejado a Grecia en camino de abandonar la zona euro este mes, minando potencialmente los cimientos de la moneda única europea. La reapertura tuvo lugar después de que el primer ministro Alexis Tsipras aceptó con renuencia un severo plan con exigencias para un rescate de sus socios europeos, pero una revuelta en el partido oficialista Syriza ahora amenaza la estabilidad de su Gobierno. “Es un paso positivo que los bancos estén abiertos, aunque el efecto es sicológico para las personas más que cualquier otra cosa”, indicó Nikos Koulopoulos, un jubilado de 65 años. “Porque para ser honestos, nada ha cambiado mucho dado que los controles sobre capitales aún se están aplicando”, explicó. Los límites sobre retiros se mantienen en 420 euros por semana, en vez de la restricción anterior de 60 euros diarios.
Además, los pagos y transferencias bancarias al exterior aún no son posibles, una situación que según dijo la canciller alemana, Angela Merkel, “no es una vida normal”, y garantizó rápidas negociaciones para un nuevo acuerdo, que se prevé ascienda a 86.000 millones de euros.
“Los controles de capital y restricciones sobre los retiros se mantendrán, pero estamos entrando en una nueva etapa que todos esperamos que sea de normalidad”, dijo la directora de la asociación de bancos griegos, Louka Katseli. Los griegos podrían depositar cheques, pero no dinero, pagar cuentas y tener acceso a cajas de depósitos y retirar dinero sin necesidad de una tarjeta para cajeros automáticos.
Atenas inició el pago de 4.200 millones de euros al Banco Central Europeo con vencimiento el lunes, luego de que las autoridades europeas acordaron la semana pasada otorgar financiamiento de emergencia.
Además, pagó 2.050 millones de euros al Fondo Monetario Internacional sobre un crédito moroso desde el 30 de junio, cuando Grecia se convirtió en la primera economía avanzada en incumplir el pago de un préstamo a la institución, junto a 500 millones de euros que debe al Banco de Grecia. (Reuters-DPA)