La precandidata a vicepresidente de la Nación por el PRO, Gabriela Michetti eligió la fachada de la Casa Histórica para respaldar a los candidatos tucumanos del macrismo al Congreso: Pablo Walter para senador, y Facundo Garretón para diputado. La senadora nacional, una de las espadas más importantes del macrismo, aseguró que no habrá ajuste en caso de que el jefe de Gobierno porteño, Mauricio Macri, acceda a la Presidencia . Sobre el sistema electoral en Tucumán, la precandidata macrista dijo que es “un delirio” que haya 25.000 candidatos en la provincia.
- Las críticas al PRO apuntan a supuestos vículos la derecha más conservadora ¿Es así?
-Queremos aclararle a la gente que nosotros nacimos en la política en 2003. No tenemos nada que ver con la década del 90. Quienes sí estuvieron son los mismos los que están hoy gobernando y diciendo esas cosas. Pretenden instalar el mensaje que somos nosotros los que vamos a hacer tal o cual cosa, cuando fueron ellos (el kirchnerismo) los que privatizaron las empresas. Y fueron ellos los que después las estatizaron.
-¿Cree que es necesario hacer un ajuste en la Nación?
-Nosotros no hablamos de ajuste, ni de privatizaciones, ni de quitarle derechos a nadie. Sino todo lo contrario.
-Pero los economistas afines al PRO hablaron de ajuste…
-Nosotros no. Nosotros hablamos de que la Argentina está con posibilidades de realizar una organización gradual de la economía. Con la capacidad de hacer un aprovechamiento de los recursos totalmente diferente de lo que se hace hoy. Nosotros recorremos las provincias argentinas y lo único que encontramos es que todas las economías regionales se encuentran en una situación de agotamiento y de ahorcamiento. No hay un equipo de economistas del PRO que esté difundiendo por ningún lado propuestas económicas.
-¿Qué opina de las denuncias de fraude y del sistema electoral que tenemos en Tucumán?
-El fraude siempre sobrevuela cuando vos tenés un gobierno que está convencido de que se tiene que quedar en el poder eternamente. Si vos tuvieras un gobierno que demuestra permanentemente una convicción democrática, el fraude no sería una palabra que estuviéramos usando.