Se pregunta si la mezcla ideológica, las fusiones y las alianzas son un signo de los tiempos. Si estamos frente a “una fusión de las ideologías” o a “una ideología de la fusión”. Griselda Barale (foto), doctora en Filosofía, enumera cinco razones por las que estas elecciones fueron diferentes:
1- Por la mezcla: “la desaparición de límites y de géneros, como se da en el arte, también se ve en la política. En el arte me parece fantástico pero en la política todavía no la comprendo. Siento perplejidad ante estas mezclas o alianzas. Quizás este sea un signo de los tiempos. Esto nos lleva a que por ahí tengamos afinidades con algún candidato pero no con todo. Por el contrario, con el que no teníamos afinidades, sí nos atraen algunas cosas. Me pregunto si esta mezcla ideológica es coyuntural, si tenemos que pensar que estamos frente a la no ideología o a la ideología de la mezcla o a la mezcla de las ideologías. Hay alianzas entre partidos que no comprendo”.
2- Falta de coherencia: “también veo una falta de coherencia en algunos discursos, que si bien son compactos llevan a la práctica acciones que lo hacen hueco, que impactan y duelen. Por el contrario, hay otras acciones que están bien, pero que no están sustentadas por un discurso político compacto. Esta falta de coherencia está relacionada con esta falta de límites y quizá de reflexión política”.
3- La participación ciudadana: “aunque votar es obligatorio, siempre hay maneras de evadir esta obligación. Sin embargo, no veía hace mucho tiempo tanta participación ciudadana. Esto es muy positivo y alentador”.
4- Polaridad: “ha habido una polarización en estos últimos años, entre ciertos medios de comunicación, como el Grupo Clarín, y el Gobierno. No creo que todo sea blanco o todo sea negro. En ambos lados hubo falta de autocrítica. Esta pelea permanente es agobiante”.
5- Ya no se vota por el bolsón: “no creo, como dice mucha gente, que los votantes están arriados, que deciden por el bolsón. Quizás eso se haya dado en algún momento, pero ya no es así. No debemos ver al votante con tanta ingenuidad ni con tanta soberbia. Es necesario hacer una lectura más respetuosa de las capacidades de los ciudadanos. Gane quien gane se debe hacer una lectura profunda: escuchar y analizar las razones del voto con una crítica respetuosa y equilibrada”.