Después de haber reconocido como hijo a Diego Junior, Diego Maradona no pudo regresar a Asia por problemas con unos papales, por lo que tuvo que regresar a su casa en Tigre.
El ex futbolista debía tomarse un vuelo en el aeropuerto de Ezeiza para regresar a Dubai, pero no pudo hacerlo porque su pasaporte había sido denunciado como robado, a pesar de que lo tenía en sus manos.
"Figuraba su pasaporte como robado pero lo tenía en la mano. Una mano negra le impidió viajar. Rarísimo", dijo Matías Mora, abogado del ex 10 a Teleshow.