El ex juez federal Manlio Torcuato Martínez, quien había sido condenado en 2015 por presuntos delitos de lesa humanidad durante la dictadura, quedó en libertad esta mañana. El ex magistrado venía purgando su condena bajo arresto domiciliario. Quedó en libertad luego de que una Cámara anulara algunos aspectos de la condena y ordenara al Tribunal que se dice nueva resolución.
"A las 11 me presenté en el Tribunal en lo Criminal Oral Federal de Tucumán (TOF) y se me notificó que ya estaba concedida la excarcelación. Acá estamos, celebrando con mi familia esta noticia", le dijo a LA GACETA Martínez en una conversacion telefonica.
Días atrás, la causa que había motivado una condena de 16 años de prisión en contra del ex juez federal tuvo un giro rotundo ante la Sala I de la Cámara Federal de Casación Penal, integrada por Ana María Figueroa (presidente), Gustavo Hornos y Mariano Hernán Borinsky (vocales).
En un fallo de 168 páginas, la Sala I había resuelto -con disidencias en algunos puntos- hacer lugar de manera parcial al recurso de casación planteado por la defensa del imputado; así, anuló diversos aspectos de la sentencia dispuesta en junio de 2015 por el TOF y ordenó que se dicte una nueva resolución, teniendo como parámetro las observaciones efectuadas por los miembros de la Cámara Federal de Casación Penal.
"Siempre tuve la conciencia tranquila”, dijo días atrás Martínez. Y remarcó que no fue denunciado “por organismos de derechos humanos”, sino que su nombre surgió durante el debate oral del caso “Romero Niklison”. “En este momento no tengo condena”, dijo el ex magistrado a este diario.
En 2015, los fiscales federales Diego Velasco, Agustín Chit y Pablo Camuña habían solicitado al TOF, integrado entonces por Hugo Cataldi (presidente), José Asís y Mario Garzón, una condena de 25 años en contra de Martínez.
Finalmente, el tribunal dictó una pena de 16 años. Según la acusación, las “acciones y omisiones” del ex magistrado habían legitimado las ejecuciones de cinco personas y “asegurado” la impunidad de los supuestos homicidas.
Pero todo esto quedó prácticamente descartado por la Cámara Federal de Casación en lo Penal. Por unanimidad, los vocales Figueroa, Hornos y Borinsky decidieron anular lo referido al delito de asociación ilícita en contra de Martínez.
Además, por mayoría, se desestimó también lo referido al abuso de autoridad y las demás imputaciones en el marco de la homicidios de los militantes de Montoneros Alejandra Niklison, Eduardo González Paz, Juan Carlos Meneses, Fernando Saavedra Lamas y Atilio Brandsen, perpetrados en mayo de 1976.