La tarde-noche que parecía iba a ser para el olvido terminó dejando sensaciones positivas para el plantel y el cuerpo técnico de San Martín. El punto que rescató agónicamente y el repunte en su rendimiento en el segundo tiempo, fueron las aristas luminosas de su primera excursión a Buenos Aires en la temporada.
Tras el 1-1 con All Boys, en el vestuario “santo” hubo coincidencia absoluta tanto sobre el muy flojo nivel mostrado en la primera etapa, como la importancia de haber salvado el invicto. “La sensación es buena para nosotros porque no hemos perdido todavía. Y los otros equipos han comenzado a dejar puntos”, señaló el capitán Sebastián Prediger.
La tabla no miente: al cierre de la cuarta fecha, San Martín y Brown de Adrogué, el único puntero, son los únicos equipos que con cuatro partidos disputados aún no fueron derrotados. Claro que los cuatro puntos de diferencia entre el líder del certamen y el “Santo” se fundamentan en los tres empates en fila cosechados por el conjunto de Diego Cagna en las últimas jornadas. En otras palabras, al equipo tucumano le está costando ganar, pero no es fácil de vencer.
Tanto para lo uno como para lo otro hay razones. El medio vaso vacío incluye la constatación de que -resultados aparte- en ningún partido San Martín exhibió demasiado juego. Y a la hora de atacar se lo suele ver lento, sin cambio de ritmo y sin explosión.
La columna vertebral
El medio vaso lleno guarda relación con la existencia de una columna vertebral que se va afirmando (Ignacio Arce, Prediger y Claudio Bieler) y con que Cagna cuenta con variantes a la hora de repensar la formación, más allá de que hasta ahora haya insistido casi siempre en los mismos nombres para la formación inicial.
De adelante hacia atrás, el debut goleador de Bieler con la camiseta albirroja es una muy buena noticia de cara al futuro. “Queríamos que se le abriera el arco a Claudio. Fue mediante un penal, pero eso no importa. Sirvió para que ganara en confianza y para darnos un empate importante”, señaló Cagna sobre el bautismo en la red del ex Belgrano.
Prediger, incluso con altibajos, es de esos números 5 que “nunca te dejan a pie”. El sábado jamás dejó de batallar, aunque por momentos estuvo muy solo en la recuperación del balón y le faltó un socio para el primer pase corto, algo que el entrenador seguramente deberá revisar. “Yo tenía una marca muy cerca también. Uno de los delanteros de All Boys estaba permanentemente a mi lado. Eso impedía que yo fuera el primer pase, que era lo que entrenamos. Esta categoría es así: se corre mucho. Es muy dura y difícil. Con el plus de que algunas canchas no están buenas. Es como una guerra”, afirmó el volante entrerriano.
Arce volvió a ser un punto alto, más allá de que perdió el invicto de su arco. No solo salvó un par de goles cuando el equipo estaba jugado en busca del empate, también resolvió bien con los pies, aun arriesgado en demasía. “El penal vino gracias a mí”, afirmó entre risas el ex arquero de Crucero del Norte, que dio la puntada inicial a la jugada que terminó con el disparo desde los 12 pasos luego de asustar por su intrepidez a más de un hincha “santo”. “Es mi estilo jugar con los pies. Diego me dice que juegue adelantado para cortar jugadas, sin arriesgar ni hacer ocuras”, agregó.
Desde el banco
Consultado sobre si había encontrado el equipo con los ingresos en el complemento de Gonzalo Rodríguez, Walter Busse y Franco Costa, todos ellos con incidencia en la mejoría experimentada en el último tramo del partido, Cagna respondió: “No. Hay muchos chicos que pueden jugar. En un momento lo hará uno, en un momento lo hará otro, pero hay un buen plantel. Costa, por ejemplo, es un jugador importante, pero por ahí jugando de entrada no lo había hecho tan bien. Hay que ir viendo quién está mejor para determinado partido”.
El entrenador se volvió a Tucumán con convicciones reafirmadas tanto en relación a lo que quiere para su equipo en la cancha como en la tabla.
“Es un torneo muy duro, tenemos que ser conscientes de que tenemos jugadores para jugar bien al fútbol. No ir por ahí al juego que propone el rival, que es de pelea, de lucha, de pelotazo. Debemos animarnos a jugar porque tenemos como hacerlo”, afirmó Cagna.
“¿Si cargamos con la mochila de la obligación de ascender? Queremos ascender, pero no tenemos ninguna mochila ni ninguna presión. La presión es que hay que ganar, como cualquier equipo, y más en San Martín, que es un grande. Pero eso no hace que nos presionemos o que tengamos más peso del que es normal. Queremos ascender y vamos a luchar para eso”, sostuvo el DT.
Triunfos de Brown (PM), Morón y Chicago
Brown (PM) derrotó 3-0 a Flandria, por la fecha 4 de la B Nacional. La sorpresa la dio Nueva Chicago que venció 1-0 de visitante a Mitre. En tanto Morón venció 1-0 a Santamarina. Hoy jugarán Rafaela-Estudiantes (SL) y Sarmiento-Gimnasia (J).