¿Por que cuesta tanto bajar la tasa de informalidad laboral a Tucumán? Una primera respuesta es que el 40% de la actividad económica de la provincia está en negro. Y esto es admitido hasta por el propio gobierno a la hora de explicar las razones de tener una recaudación de impuestos que no se condice con las características del mercado tucumano. Desde el plano académico, el doctor en Economía, Jorge Elías, explica prácticamente el mismo fenómeno: una presión impositiva elevada para el trabajo que lleva a que el salario no sea de equilibrio entre la oferta y la demanda laboral. Y, así, Tucumán vuelve a recuperar el liderazgo de uno de los indicadores socioeconómicos más preocupantes entre los grandes aglomerados urbanos de la Argentina. El empleo en negro golpea al 44,2% de los asalariados del Gran Tucumán-Tafí Viejo. Ese porcentaje representa a unos 122.580 trabajadores informales. Sólo el aglomerado de Río Cuarto (Córdoba) ha superado al comportamiento de la informalidad tucumana, con una tasa del 44,8%.
Con todo, en la comparación con el cuarto trimestre de 2016, el empleo no registrado de la provincia ha bajado 1,4 punto porcentual. En la medición del tercer trimestre del año pasado, Salta había desplazado a Tucumán con un índice del 45,7%. En esta oportunidad, la provincia ostenta el nivel más alto de informalidad del NOA, seguido por Salta con un 42,7% y por Santiago del Estero-La Banda, con un índice del 39,8%. Más atrás se ubicaron La Rioja (35,5%), el Gran Catamarca (33,9%) y Jujuy-Palpalá (31,9%).
Sin un desarrollo del mercado laboral, explica Elías, la informalidad termina captando a las personas que, de no aceptar esas condiciones, pasan a constituirse en desocupados. Tal vez el incremento del empleo en negro en el último trimestre de 2017 se constituye en una de las explicaciones de la fuerte reducción del desempleo, al 5%, en el mismo período. En la comparación interanual, el dato llamativo fue la fuerte reducción de la desocupación entre los jóvenes de hasta 29 años. De acuerdo con los datos difundidos ayer por el Instituto Nacional de Estadística y Censos (Indec), la tasa de desempleo entre las jóvenes bajó del 21,1% al 9,9%, mientras que entre los jóvenes tucumanos el descenso fue del 16,1% registrado al cierre de 2016 hasta el 10,9% para el último tramo del año pasado.
A nivel nacional
La cantidad de trabajadores no registrados se ubicó en 34,2% en el cuarto trimestre del año pasado, por encima del 33,6% de igual período de 2016 y levemente por debajo del 34,4% medido entre julio y septiembre de 2017, informó el Indec. La suba en la medición interanual del índice de trabajadores no registrados se dio a la par de una reducción en el Índice de desocupación, que se ubicó en un 7,6% al cierre del año pasado, con una merma de 0,9 punto porcentual en relación con el tercer trimestre y de 1,7 punto porcentual frente al segundo trimestre de 2016, cuando el Indec reanudó la medición. El ministro de Trabajo, Jorge Triaca, enfatizó en diversos foros que uno de los principales desafíos para el Gobierno y para el sector privado es bajar la informalidad laboral, que actualmente supera un tercio de la población económicamente activa.
“Ese es el desafío que plantea el presidente (Mauricio) Macri. Generar inversiones para la creación de empleos. Enfrentamos una situación de informalidad: más del 30% de la población no tiene cobertura de seguridad social, no hace aportes al sistema previsional e impositivo y eso genera una mayor presión sobre quienes sí están en el circuito formal”, dijo Triaca en un foro empresario. La mayor cantidad de trabajo precario se registró en el (NOA, con el 40,1% de la población económicamente activa, mientras el menor porcentaje se verificó en la Patagonia, con 18%.