En San Javier, el Centro de Atención Primaria de la Salud (CAPS) funciona dentro del Centro de Integración (CIC). Es el encargado de brindar servicios básicos de salud, pero no cuenta con una ambulancia propia: la única disponible pertenece a la comuna. Según los vecinos, el vehículo estuvo parado durante dos semanas, hasta que volvió a funcionar el jueves. Ellos denuncian que la situación es “un desastre”.
“El funcionamiento de la ambulancia es todo un caso. Es vieja y siempre tiene problemas. El único hospital, el (Dr. Ramón) Carrillo, está demasiado lejos, a casi 40 minutos, en Yerba Buena. Y a veces uno no tiene movilidad, mientras la ambulancia está rota. En el CAPS los médicos sólo trabajan hasta las 19, y ni siquiera los sábados y domingos. Si te pasa algo te morís, porque no tenes solución”, comentó una vecina, que no quiso revelar su nombre por temor a represalias.
La ambulancia de la comuna es solamente una unidad de traslado. A pesar de contar con algunos elementos, no tiene quién los use porque no está medicalizada, es decir que el chofer viaja solo con el paciente. Modelo Mercedes Benz del año 1980, cuenta con casi medio millón de kilómetros encima. Sin embargo el tiempo no es lo único que afecta al vehículo, ya que fue protagonista de dos accidentes de tránsito.
Uno de los cuatro choferes, Fabián Chaile, manifestó que a pesar de que la ambulancia debería funcionar las 24 horas está más tiempo en el taller que en la calle. “Es mucha la cantidad de gente que pide ser trasladada. Hay días en los que subimos y bajamos del cerro hasta cinco veces”, indicó.
El delegado comunal, Gonzalo Vildoza, afirmó que el último arreglo del móvil costó alrededor de $ 20.000 y que antes habían gastado $ 50.000 en otra reparación. “La mayor parte de nuestro presupuesto se va en mantener la ambulancia. Pedimos asistencia al Sistema Provincial de Salud (Siprosa) para que nos provea un sistema de comunicación, ya que los handies están rotos y la radio de la base no funciona. Pero ellos no pueden darnos una mano porque son reparticiones diferentes”, afirmó.
Según Vildoza, la ambulancia es vieja e inclusive atiende más allá de la jurisdicción de la comuna. “Es una unidad que tiene más de 20 años. Cubrimos 20 kilómetros, desde la primera confitería hasta la zona del Portezuelo, que corresponde a la comuna de Raco. Si la ambulancia está no puede negarse a hacer los traslados, ese es el procedimiento asignado a los choferes”, explicó. Empleados de la comuna afirman que los veraneantes también hacen uso de ella.
Vicente Parra visita San Javier desde hace más de 50 años y denunció que durante el verano es cuando más se necesita del vehículo. “Sábado y domingos se llena de gente. Por la zona circulan unos 500 autos. Sin embargo, no hay guardia médica”, criticó.
Roxana Serrano, directora del del CAPS, detalló que si bien a la ambulancia la mantiene la comuna, el trabajo es conjunto. “Si ellos reciben el llamado de algún vecino primero se lo trae para acá y se lo evalúa. Si se puede brindarle una solución al problema la ambulancia no lo baja. La idea es descongestionar el sistema, usar eficientemente los pocos recursos que tenemos. Cuando no hay ambulancia recurrimos a la red de emergencia del 107 para derivar al paciente”, precisó.
Serrano consignó que no todas las situaciones necesitan ambulancia. “Hay que educar un poco más a las personas -añadió-. En San Javier un gran porcentaje de la gente tiene vehículo. Si es un herido no lo vamos a mandar en una moto, por supuesto, pero hay que ser criteriosos”.
El CAPS cuenta con un médico clínico, un odontólogo, pediatría, ginecología y enfermería. No obstante, Serrano explicó que cuando los especialistas salen de vacaciones durante el verano es difícil conseguir reemplazantes. “Cuesta conseguir que vengan a trabajar en San Javier -reveló-. Acá cobran lo mismo que otro reemplazante que esté en Yerba Buena o en la capital, pero la distancia y el tiempo son diferentes”. (Por Augusto Arnone)