Francisco Estrada, presidente de la Asociación de Productores de Arándanos de Tucumán (Apratuc) comentó para este Suplemento Rural cómo visualizan, desde el sector, la problemática de los delitos rurales que, en distinta medida y momentos del año, afectan a los productores agrícolas.

“En general, puedo señalar que en nuestro caso el tema de los delitos rurales no es una cuestión problemática. Sí es cierto que tuvimos algunos inconvenientes importantes”, comenzó relatando.

“En mi caso particular, en enero de este año tuvimos un intento de ingreso a nuestra finca, pero no sucedió más que eso. Pero el año pasado sí tuvimos un caso importante porque nos sustrajeron muchas herramientas de trabajo. Eso nos obligó a tener serenos y a estar alertas, en especial durante las noches”, describió. Por ejemplo, comentó que a los tractores tuvieron que colocarles GPS por seguridad. “Sí, tomamos medidas preventivas, por el momento”, reconoció el productor y exportador de arándanos. “Por ahora son robos menores, y nada de máquinas pesadas”, aclaró.

Estrada reconoció que todos los arandaneros tomaron medidas de prevención, pero precisó que “la inseguridad es un tema que crece al ritmo de lo que sucede en el país; en el campo no tenemos muchos casos, pero hay que estar atentos y trabajar en prevención”.

“Pero hasta ahora -reiteró- en la cuestión de los delitos rurales en los campos implantados con arándanos no sucede nada grave, por el momento”. Y volvió a reiterar: “en nuestro sector agropecuario estamos atentos a los sucesos; sí adoptamos medidas de prevención, y por sobre todo no nos descuidamos. Nos mantenemos alertas”.