El abogado Gustavo Morales volvió ayer a la comisión de Juicio Político de la Legislatura para ratificar y ampliar el segundo pedido de destitución de la jueza de Paz Josefina Penna (Yerba Buena). El letrado reiteró que la funcionaria debió haberse apartado de los procesos que involucran a Moviser SRL, la empresa de sus ex cuñados. Además, Morales manifestó que la jueza debía ser investigada por la falta de control a los notificadores Juan Luis Iramain y Adriana Torres, cuya actuación había derivado en la interposición de “numerosos juicios” por redargución de falsedad (para destruir la fe pública de los instrumentos).

El denunciante aprovechó el trámite ante la comisión de Juicio Político para cruzar a Arnaldo Ahumada, defensor de Penna. “A pesar de la flagrante ignorancia del abogado de esta funcionaria, el carcamal y ‘lobbista’ Ahumada, la jueza de Paz debía excusarse por la causal de violencia moral o también conocida como ‘razones de decoro o delicadeza’ teniendo en cuenta la frecuencia de trato con la familia Jiménez Montilla (propietaria de Moviser SRL)”. Morales recordó que Penna estaba casada con Marcos Jiménez Montilla, hijo del magistrado federal Carlos Enrique Jiménez Montilla, y que sus ex cuñados Máximo Jiménez Montilla y Mariana Jiménez Montilla aparecen como propietarios de la firma. La denuncia atribuye un “un trato preferencial” a Moviser SRL, que tiene sede en Yerba Buena. Previamente, Morales había acusado a la funcionaria por intervenir en un casamiento en Cafayate (Salta) por medio del empleado Gonzalo Paz. La Legislatura ya trasladó ese cuestionamiento a Penna.

El martes, Ahumada había defendido la actuación de la jueza en los juicios de Moviser SRL. “Estos funcionarios actúan sólo al efecto de las notificaciones que ordena el juez del proceso. Las posibilidades de inhibición son mínimas, sobre todo en el caso de una lega. Pero, más allá de eso, en los libros consta que Penna hizo los trámites en 24 horas hábiles, como debe ser: no favoreció a ninguna empresa”, había expresado. El letrado había añadido: “el ‘chico’ Morales carece del mínimo de seriedad. Hace acusaciones con ‘refritos’”.

Respecto del primer pedido de destitución, Penna había manifestado que ella había casado a los contrayentes en su juzgado y que, luego, el empleado Paz se trasladó a Cafayate. “Fue una mera lectura del acta de matrimonio y se firmó una hoja en blanco con los datos de los novios: es algo que se estila”, había expresado.