Seis homicidios se registraron en diferentes lugares de la provincia, pero la cara de espanto de los vecinos en todos lados era la misma. “Es increíble lo que está pasando en la provincia. Estamos sufriendo un baño de sangre y nadie hace nada”, dijo Mario Herrera en el barrio Oeste II.
Entre las 6 y las 1 de hoy los policías y los investigadores del Ministerio Público Fiscal iban de un lado a otro. Por primera vez en el año, y después de mucho tiempo, se registraron seis homicidios en poco más de 18 horas. Ni cancelando los descansos de los equipos alcanzó para intervenir en tantos casos. “No paraban de llamarnos. Se tuvo que dar intervención a las comisarías jurisdiccionales para que atendieron los hechos”, explicó una fuente del Ministerio Público Fiscal.
El primero se produjo en Alderetes. Luego llegó el caso de barrio Oeste II, siguió el de Barrio Sur, después el de Villa Alem, otro en barrio Victoria, y el último, otra vez en Alderetes. Hasta el momento fueron cinco los casos considerados como crímenes de la inseguridad. Dos jóvenes murieron en intentos de robo y los otros dos, fueron supuestos asaltantes que terminaron siendo ultimados por las personas que habían elegido asaltar. “Está todo mal en todos lados. Los crímenes fueron en distintos puntos de la capital, lo que habla que la inseguridad está creciendo a todo ritmo”, comentó María Inés Camandona, estudiante de derecho que estaba aterrada por lo que había sucedido en General Paz al 100. “Soy de Catamarca y vivo con una hermana que cursa el primer año de medicina. Estamos espantadas con lo que pasa en esta provincia. Casi no salimos por temor a que nos pase nada”, agregó.
La fiscala Adriana Giannoni, que investigará los cuatro hechos, reconoció que ayer estuvieron desbordados y se mostró sorprendida por la cantidad de casos. “Tuve 11 días de turno en la Fiscalía I de Homicidios y no tuvimos ningún caso, pero ahora, en menos de tres días, sumamos cinco, cuatro ayer y el de la menor el viernes a la noche”, destacó ayer a la tarde, antes de que se produjeran dos homicidios más.
“Estamos azorados. Si bien aún queda mucho por analizar los móviles de los crímenes, son cuatro homicidios. Quedamos preocupadísimos con lo que sucedió”, explicó el secretario de Seguridad Luis Ibáñez.
El funcionario insistió que se debería realizar un análisis sociológico sobre lo que está sucediendo. “La del sábado fue la primera noche primaveral en serio. Evidentemente al aumentar la temperatura, se incrementa el consumo de alcohol y droga. Eso podría incidir en un aumento de casos”, argumentó.
Tres de las cuatro víctimas, según los primeros informes, habrían estado alcoholizados en el momento de perder la vida. Dos de ellos habrían tenido problemas de adicciones. Y uno de los casos se produjo cuando dos jóvenes adictos intentaron robarle al dueño de casa con el que habían estado compartiendo un beberaje. El último homicidio se produjo, al parecer, por una pelea entre chicos que tienen problemas de adicciones.
“Tenemos que estudiar detenidamente lo que está pasando. Fue una jornada muy violenta y se produjeron hechos en distintos sectores. Veníamos de días tranquilos, sin sobresaltos, y terminamos con esto”, concluyó Ibáñez.
Con estos nuevo seis hechos, según los casos publicados por LA GACETA, ya son 86 los homicidios cometidos en lo que va del año, 18 más que en idéntico período de 2018. De ese número, 44 son en situación de robo, lo que representa más del 50% del total de los hechos registrados. Ya son 17 las víctimas que murieron en manos de sus asaltantes, mientras que 20 fueron supuestos asaltantes asesinados por las víctimas que eligieron robar. Hubo tres abatidos por la policía y cuatro personas perdieron la vida al quedar en medio de enfrentamientos producidos por un hecho vinculado a un delito contra la propiedad.
El segundo móvil de los crímenes registrados hasta ayer, es la violencia intravecinal, con 25 casos. En tanto que son 17 las víctimas de violencia intrafamiliar.