NANTES, Francia.- Un incendio en la catedral de la ciudad occidental francesa de Nantes hizo estallar ayer las vidrieras y destruyó el órgano del edificio del siglo XV, y las autoridades dijeron que sospechan que las llamas fueron provocadas.
El fiscal Pierre Sennes dijo que se habían iniciado tres incendios en el lugar y las autoridades estaban tratando el incidente como un acto criminal. Las autoridades indicaron que se había abierto una investigación.
El incendio comenzó temprano en la mañana, envolviendo en grandes llamas el interior de la estructura gótica. Más de 100 bomberos trabajaron en el lugar y lograron controlar el fuego tras varias horas, extinguiéndolo por completo al mediodía.
El siniestro se produce poco más de un año después del gran incendio que afectó a la catedral de Notre-Dame en París, el cual destruyó el techo y su espiral principal.
“Después de Notre-Dame, la catedral de San Pedro y San Pablo está en llamas. Apoyamos a los bomberos que están tomando todos los riesgos para salvar esta joya gótica”, tuiteó el presidente Emmanuel Macron desde Bruselas, donde asiste a una cumbre de la Unión Europea.
El fuego se originó detrás del gran órgano, que quedó completamente destruido, según dijo a los periodistas el jefe de bomberos local, Laurent Ferlay. Las vidrieras frontales reventaron y las llamas consumieron también un cuadro del siglo XIX procedente de Roma.
Sin embargo, los daños no fueron tan graves como se temía inicialmente. “No estamos en un escenario de Notre-Dame de París. El techo no ha quedado afectado”, dijo Ferlay.
El primer ministro, Jean Castex, y los ministros de Cultura e Interior visitaron el lugar más tarde. “El Estado se ocupará de su parte de responsabilidad (para la restauración)”, dijo Castex a los medios al exterior de la catedral, agregando que no tenía más detalles sobre la causa de las llamas.
Jean-Yves Burban, que regenta un quiosco de prensa frente a la catedral, dijo que abrió su negocio y escuchó una explosión en torno a las 7.30. Cuando salió, vio grandes llamas procedentes del templo. “Estoy agitado porque llevo aquí ocho años y veo la catedral cada mañana y tarde”, afirmó. “Es nuestra catedral y tengo lágrimas en los ojos”.
Sin embargo, no es la primera vez que el fuego daña la catedral de Nantes, a unos 340 kilómetros al suroeste de París. Fue parcialmente destruida en 1944, durante la Segunda Guerra Mundial, después de los bombardeos aliados. En 1972, otro incendio destruyó completamente el techo. Fue reconstruida 13 años después con una estructura de hormigón que reemplazó el antiguo techo de madera. (Reuters)