APLAUSOS
Al Gobernador de Tucumán y a su vice por el estricto grado de subordinación de sus senadores y diputados nacionales en el cumplimiento de la “obediencia debida” a la orden del Presidente y vice de la Nación: con sus votos afirmativos en las últimas sesiones del Congreso de la Nación dictando una ley de movilidad de los sueldos de los jubilados dañándolos con su grupo familiar y arrojándolos cruelmente al vergonzoso estado de necesidad, aumentando el número de argentinos que viven en el peor estado de pobreza. Aplausos porque desde siempre nos engañaron, que de ser elegidos nos defenderían de cualquier y toda orden o resolución que nos perjudique y hasta prometieron un aumento del 20% en nuestros sueldos. Felicitaciones por sus “versos” cuando hicieron uso de la palabra mintiendo que lo hacían en beneficio de nuestro futuro. Un juez nacional demostrando su afiliación, a contrapelo de la incompatibilidad ordenada en el art. 5 de la Ley Nacional 24.018, dictó sentencia ordenando a la Nación, curioso y risible, ordenando a la vicepresidente que se pague a sí misma o le avise al Presidente que le corresponde cobrar más de dos millones de pesos por mes al acumular la pensión graciable en condición de viuda de un ex Presidente, el sueldo de jubilación graciable como ex Presidente, el sueldo de actual vicepresidenta en ejercicio y otros millones de pesos más en concepto de retroactivos por haberes impagos. Y le queda el beneficio de cobrar otro sueldo de jubilación graciable como ex Vicepresidenta al término de su actual mandato. Todos los argentinos de bien menos los políticos aludidos sienten vergüenza que prácticamente el mismo día votaron esta nueva ley sentenciando a los jubilados y pensionados a ingresar a la situación de abandono y pobreza que sumados llegaríamos a veinte o treinta millones la vicepresidenta era favorecida a percibir mensualmente un haber superior a dos millones de pesos y se molestan cuando les reclamamos que millones de hombres y mujeres que trabajaron y aportaron al Estado la gran mayoría superando los años obligados por la ley, hoy estén cobrando $ 19,800 que no les alcanza para comprar alimentos, medicinas, alguna ropa o calzado, alquiler de vivienda y con nietos a su cargo, que los obliga a pedir préstamos a sabiendas que no podrán pagar.- En LA GACETA del 31/12 el Presidente dijo yo cumplo con mis promesas de campaña al promulgar la ley del aborto contrariando a más de la mitad de los argentinos pero con nosotros no cumplió y en contrario nos castigó bajando nuestros haberes con esta nueva ley. En LA GACETA del 02/01 el periodista Federico Türpe en su artículo “Fuera de Contexto” se olvidó de los jubilados y pensionados provinciales y municipales transferidos a la nación que siguen reclamando actualización de sus sueldos con el 82% móvil automático ordenado por leyes y sentencias judiciales, que es de público conocimiento y obviamente nos paguen también los dineros retroactivos consecuencia de haberes impagos, como un Juez amigo ordenó pagar a vicepresidenta. Igual Justicia.
Ángel Ricardo Salguero
salgueroricardoangel@gmail.com
CRISIS EN LA SALUD
La crisis del Subsidio de Salud está relacionada con una reforma a la salud. Es impulsada por el gobierno nacional y se denomina “sistema nacional integrado”. En la actualidad coexisten tres subsistemas: obras sociales, hospitales públicos y prepagas. Proponen una “canasta prestacional” (menos prestaciones) que reemplace al programa médico obligatorio. “Brindar” una atención de acuerdo a la capacidad de pago del trabajador al estilo medicina prepaga. El objetivo con el Subsidio de Salud, en este cuadro, es modificar el ya disminuido sistema de cobertura médica que ofrece. Vaciarlo y cederlo al mercado capitalista que conforman las empresas privadas médicas-farmacéuticas-aseguradoras y financieras. Un mercado conformado por 330.000 afiliados. Una buena parte de ellos son trabajadores que aportan el 4,5% de sus sueldos, completándose con el “aporte” patronal del mismo porcentaje. Una aproximada planilla salarial de $3.000 millones de pesos más jubilados junto una recaudación que ronda los 500 millones mensuales. Los “acreedores” denuncian “incumplimientos de los plazos para los pagos de las prestaciones con pacientes Covid-19 y el congelamiento de aranceles desde 2019” (La Gaceta) y una deuda de $400 millones. Solicitan una actualización de la prestaciones del 45%, pero a “los afiliados sólo se les aumentó un 13% el salario en 2020”.“El Subsidio de Salud está siendo desfinanciado por la Provincia, sobre una masa salarial de $ 10.000 millones deberían llegar al Subsidio de salud $900 millones mensuales”. “La facturación de la obra social provincial en algunos sanatorios llega a ser el 80% y en otros el 60%”. Según Eduardo Garvich, “la Provincia está cumpliendo con los fondos que le corresponden al Subsidio de Salud, pero que los aportes de los afiliados viene creciendo por debajo de los costos de los insumos de salud. El desmantelamiento del Subsidio de Salud, creado en 1969, apunta a dar un golpe de gracia al sistema de salud pública, es decir otra reducción del salario trabajador para ser transferido al mercado capitalista de la medicina. Sus recursos, planificación y acciones de salud deben estar controlados por los trabajadores de la salud y sus trabajadores beneficiarios.
Pedro Pablo Verasaluse
pedropabloverasaluse@gmail.com
UN PEOR AÑO
"Es preferible para los pueblos tener malas leyes con buenos jueces que buenas leyes con malos jueces". Francesco Carnelutti. Este fin de 2020 llegó a la Argentina, como en todo el mundo, con casi nada que celebrar, salvo para quienes aún estamos vivos, que no es poco; en general, no se vieron las cañitas voladoras ni los atronadores petardos de antaño pero, en cambio, fue pródigo en escalofriantes estafas de la política y, sobre todo, de la Justicia a la ciudadanía de a pie. La lista no puede ser más amplia: los reiterados ataques de la PresidenteVice al Poder Judicial y la Procuración General, los inauditos e ilegales privilegios previsionales otorgados a Cristina Fernández y a Amado Boudou, los beneficios veraniegos que éste obtuvo por la insólita curiosidad de un Juez, el regreso del carísimo (para los demás argentinos) capitalismo de amigos, el nuevo recorte a las jubilaciones, las originales moratorias impositivas concedidas a Cristóbal López y sus socios, la pobreza generalizada y la curiosa paz social para el kirchnerismo, la reiterada intervención estatal en la economía y el retorno del populismo extremo, la ideologización criminal de las relaciones exteriores y el peligroso abrazo estratégico con China, etc.. El Congreso sancionó la genocida ley de interrupción voluntaria del embarazo. Creí que los senadores de las provincias del norte, en especial, se opondrían a este adefesio asesino, pero resultó evidente que la fuerte presión del Ejecutivo consiguió conmover la voluntad de los gobernadores. Ahora, sólo las acciones de inconstitucionalidad que muchos iniciarán, y jueces con los pantalones bien puestos, podrían detener esta injustificable locura. Hubo algo bueno en la noticia del fallo judicial que ordenó que se paguen a Cristina Fernández dos jubilaciones de privilegio, a las cuales se adicionará su sueldo como Vicepresidente, algo totalmente prohibido por la ley, lo que originará que perciba un haber mensual de dos millones mensuales, sumada a una retroactividad estimada en cien millones, y todo ello exento del impuesto a las ganancias. Y lo bueno fue que se conociera el mismo día en que se sancionó la ley que excluye a la inflación del cálculo de los incrementos de las jubilaciones, en un país donde los expertos creen que superará el 50% este año. Lo que más llamó la atención del mes de diciembre, marcado por un aumento sideral de la pobreza y de la indigencia, la presencia del hambre en las puertas de todas las ciudades, la creciente inseguridad, la inexistencia del año escolar y la consecuente deserción definitiva de tantos chicos, la caída en el poder adquisitivo del salario y de las jubilaciones y la pérdida de puestos de trabajo, el cierre y la emigración de empresas, fue el atronador silencio de la calle. Sólo espero que hayamos aprendido, mientras nuestra vida se deteriora cada día, que la solución no la aquéllos que, con su afán por el poder y su falta de moral, nos han hundido en esta ciénaga infinita.
Enrique Guillermo Avogadro
ega1@enriquegavogadro.com.ar
RENUNCIAR NO DUELE
Sería mucho pedir que Cristina Fernandez y que Mauricio Macri, personas que irritan a la sociedad, ambos multimillonarios, renuncien a sus ambiciones y se vayan con sus familias a una isla paradisíaca, sin extradición, a gozar de su fortuna, mal o bien habida, se agradecería. Quizás, la decisión de estos dos personajes, sean imitados por muchos políticos y gremialistas, que desde hace muchos años ocupan páginas en los diarios y programas de TV, o alguna jubilación de privilegio. Las nuevas generaciones que estudian, que se preparan en las nuevas tecnologías, solidarias, tendríamos que darle la oportunidad de trabajar por nuestro país desde la dirigencia. Así como estamos y con los dirigentes que tenemos, la situación cada vez más se empeora.
Carlos M. Villaluenga
pauforna@hotmail.com
IN DUBIO PRO REO
No hace falta que conozca el latín cada integrante del Jurado de Enjuiciamiento que se ocupa del juez Pedicone. Si la Ley 8.734 consagra que el jurado puede otorgar hasta 30 días de plazo para el acusado en cuanto a la producción de pruebas debe leerse no restrictivamente como una facultad del jurado sino como un derecho que le posibilite probar su inocencia al acusado. El principio jurídico de inocencia sobresale. Aquí, concretamente aquí, se perfila casi nítidamente, la sentencia en contra del juez que ya la tienen ordenada y planchada “in pectore” (otra vez los clarísimos latinismos) los miembros del jurado que -llama la atención- mancomunadamente coincidieron en negarle al acusado el derecho a utilizar los treinta días legales para ampliar la producción de pruebas. No los pidió porque necesitaba pensar en su defensa por más tiempo sino para aportar a los juzgadores más pruebas (es un derecho inalienable) y éstos se conforman con las ya producidas y le niegan ese derecho. Da la sensación (insisto, “sensación”) de que ya quieren terminar el “trabajo de juzgadores” y tomar sus vacaciones. Humanamente razonable, pero no a costa de cercenar derechos individuales privilegiando los propios “privilegios”: pulgar para arriba o abajo, a como sea. Tuve oportunidad de comentar para LA GACETA Literaria un libro del fiscal federal Delgado sobre la “justicia”. Tanto me aclaró que compré el segundo libro sobre el tema IN-Justicia del mismo autor.
Carlos Duguech
c.duguech@gmail.com