El miedo y la angustia dominaron las últimas horas en Tel Aviv. Los cohetes lanzados por el grupo Hamas alcanzaron la ciudad más grande de Israel, y otras localidades, haciendo sonar las sirenas de alerta.
El escenario entre Israel y Hamas se encamina hacia una "guerra a gran escala", advirtió ayer el enviado de la ONU para Medio Oriente, Tor Wennesland. "Una guerra en Gaza sería devastadora y la gente pagaría el precio" en este pequeño enclave palestino, que ya sufre de la pobreza y de una tasa de desempleo que ronda el 50%, dijo el diplomático.
En medio de ese clima de hostilidades, Carlos Chacana, ex futbolista tucumano que jugó en San Martín y en River, vive las horas más tensas en medio del conflicto. Cada vez que suenan las alarmas, el ex futbolista junto a su esposa Priscila Radusky y a sus hijos (Tiziano y Ronen) deben utilizar el refugio, ubicado en el barrio de Ramat Gan.
Anoche, la aviación israelí voló un edificio de 12 plantas en el que tenían sus oficinas altos cargos de Hamas y luego otro edificio de nueve plantas, en el que había un canal de televisión local, viviendas y tiendas.
El Ejército dijo que el objetivo era el jefe de inteligencia militar de Hamas y el director de contrainteligencia del movimiento islamista. Hamas dijo luego en un comunicado que ambos murieron en el ataque.
"Cayeron bombas"
"Ayer a la tarde fue tremendo y a las madrugadas levantamos por las sirenas -dijo Chacana a LAGACETA.com-; no esperábamos que tiren tantos cohetes como titraron. Cerca de casa están la cúpula de hierro, pero un par de bombas cayeron. Ojalá que mejoren las cosas. En el sur siguen atacando. Esperemos que no empeore como pasó ayer a la tarde, a unos 40 kilómetros desde Gaza hasta Tel Aviv", precisó.
Hoy, la aviación israelí bombardeó decenas de objetivos de Hamas en Gaza, incluyendo la comisaría central de Ciudad de Gaza, que quedó destruida.
El refugio
Chacana explicó que la situación es complicada para todos, por los niños, las familias. "Esto no le hace bien a nadie -remarcó el ex futbolista-; en Gaza hay gente de bajos recursos y cuando Israel ataca lo hace en los puntos que tienen a esos sectores como blancos y eso es lo más triste, como nos pasó aquí también. Hoy no hubo entrenamientos en los clubes, ni escuela, aunque sí algunas oficinas pudieron trabajar, pero se suspendieron varias actividades para prevenir cualquier situación. Por ahora estamos en casa"
"Cada departamento debe tener una habitación reforzada, que funciona como refugio y si el departamento no lo tiene, entonces el edificio está obligado a tener un refugio para todos los residentes. Cada vez que suena la sirena tenemos que quedarnos en ese refugio", detalló.
Tras los ataques nocturnos, Hamas lanzó una nueva andanada de cohetes, de nuevo contra la ciudad Tel Aviv. El líder de Hamas, Ismail Haniyeh, pidió a las fuerzas de Israel que se retiren de la Explanada de las Mezquitas de Jerusalén este, escenario en los últimos días de enfrentamientos entre la policía israelí y palestinos que dejaron más de 700 heridos.