La esgrimista argentina Belén Pérez Maurice recibió una propuesta de casamiento por parte de su entrenador Lucas Saucedo, minutos después de la frustración vivida por su eliminación en los Juegos Olímpicos Tokio 2020 con una polémica derrota ante la húngara Anna Marton en primera ronda de sable individual femenino.
Finalizada su tercera participación olímpica, la atleta nicoleña no ocultaba su decepción por los fallos del jurado que encaminaron la victoria en favor de la europea, sin saber que un hecho inesperado cambiaría radicalmente su humor.
De la contrariedad por la derrota pasó a la emoción con lágrimas en el rostro cuando su pareja, el maestro de esgrima Saucedo, apareció detrás de ella y frente a las cámaras de televisión con un cartel manuscrito que proponía: "Flaca, ¿te querés casar conmigo? Por favor".
La esgrimista abrió sus ojos de par en par y dio un grito de exclamación ante semejante sorpresa, a la que respondió un rotundo: "sí".
Saucedo explicó ante la cámara de TyC Sports que la idea la tenía pensada de antemano: "son 18 años juntos" -repasó- y aceptó que, de algún modo, sirvió para "olvidarse del 'turro este' (por el árbitro) que nos sacó un par de golpes".
La bronca por la eliminación
Pérez Maurice, de 36 años, perdió con Marton 15-12 y se retiró de la superficie de competencia visiblemente disconforme por la actuación del jurado, que determinó en favor de la húngara algunos golpes decisivos para el desenlace del enfrentamiento.
"La verdad, que es cualquiera", se escuchó decirle a Saucedo apenas consumada la derrota que cerró su tercera experiencia en los Juegos tras Londres 2012 y Río de Janeiro 2016.
La nicoleña terminó ganando el primer asalto por 8-5, pero cuando estaba 5-4 arriba la húngara sufrió un golpe en la rodilla izquierda que obligó a su atención por espacio de dos minutos.
En el arranque del segundo asalto la argentina reclamó un punto pidiendo video pero no le fue concedido y Marton igualó en 8, instancia que se repitió a la inversa cuando estaban igualadas en 12, por lo que pasó al frente la húngara 13-12 y luego estiró a 14-12.
Allí fue cuando Marton volvió a acusar un dolor en esa rodilla izquierda, pero ya no podía reclamar más atención.