Los casos de Covid se multiplican en Shanghai que amplía zonas de confinamiento

Autoridades chinas comenzaron a bloquear algunas áreas del oeste de Shanghái dos días antes de lo previsto, ya que los nuevos casos de Covid-19 en la ciudad más poblada del país aumentaron en un tercio, a pesar de las estrictas medidas para detener la propagación del virus.

Hogar de 26 millones de personas, el centro financiero de China se encuentra en el tercer día de un cierre que divide la ciudad aproximadamente a lo largo del río Huangpu, separando el sector histórico al oeste del río de las áreas financieras e industriales del este para realizar pruebas masivas de manera escalonada.

Si bien los residentes en el este han estado aislados desde el lunes, los del oeste inicialmente comenzarían el confinamiento de cuatro días el viernes.

Aislar una gran metrópolis como Shanghái daría como resultado una reducción del 4% en el Producto Interno Bruto real nacional, según estimaron a mediados de marzo economistas de la Universidad de Hong Kong, de la Universidad de Tsinghua y otros institutos.

El miércoles, Shanghái informó un récord de 5.656 casos asintomáticos de Covid y 326 casos sintomáticos para el 29 de marzo, frente a los 4.381 nuevos casos asintomáticos y 96 nuevos casos con síntomas del día anterior. China reclasifica los casos asintomáticos siempre y cuando desarrollen síntomas más tarde.

Varios residentes que viven en distritos del oeste recibieron el martes un aviso de sus comités de vivienda de que se les impediría salir de sus complejos durante los próximos siete días.

"Reanudaremos la vida normal pronto, pero en el próximo período de tiempo les pedimos a todos que se adhieran estrictamente a las medidas de control de la pandemia, no se reúnan y reduzcan los movimientos", dijo un aviso del comité de vivienda visto por Reuters.

Mientras tanto, el distrito de Minhang, en el suroeste de la ciudad, hogar de más de 2,5 millones de personas, explicó que suspendería los servicios de autobuses públicos hasta el 5 de abril.

Las autoridades de Shanghái dijeron en una conferencia de prensa el miércoles, que desde que comenzó el confinamiento el lunes habían realizado 9,1 millones de pruebas de ácido nucleico.

También sostuvieron que planeaban desinfectar lugares como edificios de oficinas, sitios de construcción, mercados y escuelas en una campaña de un mes.

La política de China sobre la pandemia indica que su objetivo es eliminar todos los casos y las personas que dan positivo son enviadas a centros de cuarentena u hospitales centrales. Los contactos cercanos y los vecinos deben hacer cuarentena en casa.

Muchos en la ciudad han recurrido a las redes sociales para expresar sus frustraciones por el encierro, publicando videos e imágenes de centros de cuarentena abarrotados y también pidiendo ayuda con el tratamiento médico y la compra de alimentos.

La vida empresarial también se ha visto seriamente afectada.

El bloqueo ha afectado la producción de autos en la ciudad y las empresas chinas han detenido una ola de ofertas públicas iniciales nacionales, según muestran documentos, ya que el aumento de casos ha obstaculizado la diligencia debida y la recopilación de información, lo que afecta a una recaudación de fondos estimada en más de U$S 9.000 millones.

En China continental, las cifras diarias de nuevas infecciones locales en las últimas dos semanas fueron mucho más altas que las observadas en los primeros dos meses de este año, lo que marca la mayor ola desde la peor fase de la pandemia en 2020 desatada en Wuhan.