La intrincada trama del caso de Adhemar Capital (AC) tuvo un giro inesperado. La ex esposa de Edgard Adhemar Bacchiani y también procesada en la causa, presentó un escrito ante la Justicia Federal para que rechace el pedido de arresto domiciliario. Mientras tanto, el expediente sigue sin avanzar por problemas de competencia.
El CEO de la empresa fue acusado en un primer momento de dirigir una asociación ilícita que habría cometido una millonaria estafa en la compra y venta de criptomonedas, posible lavado de activos y de haber realizado operaciones financieras sin autorización.
El juez federal Ángel Contreras, después de haber tenido más de seis meses la causa en su poder, se declaró incompetente y anunció que sólo lo mantendría detenido por haber realizado transacciones ilegales.
El código penal establece penas de entre uno y cuatro años a las personas que cometieron este delito, pero en el caso del CEO sería de cumplimiento condicional porque no cuenta con condenas previas. Por ese motivo, su defensor comenzó a realizar las gestiones para que se lo dejara en libertad o, en su defecto, se le permitiera la oportunidad de que cumpliera la prisión preventiva bajo la modalidad de arresto domiciliario. Basaba su petición en la necesidad de cuidar a sus hijos, especialmente uno de ellos, que padece una patología que requiere cuidados especiales.
Cuando todo parecía que el planteo se resolvería favorablemente, apareció un imprevisto que tiene nombre y apellido: Zaraive Celeste Garcés Rusa. La ex mujer del acusado no sólo presentó un escrito para solicitar que se le rechace el planteo, sino que además aportó algunos elementos para conocer el funcionamiento financiero de AC. La joven venezolana, que tiene un hijo con el empresario, también fue procesada en la misma causa, aunque por razones humanitarias sigue el proceso en libertad.
En un escrito en la Justicia Federal, Garcés Rusa no sólo denunció el incumplimiento del CEO en sus obligaciones como padre, sino que además marcó un mapa sobre los bienes del procesado que los investigadores nunca pudieron encontrar.
La venezolana, en el pedido de reparto de bienes de la causa de divorcio, contó que los inmuebles más valiosos de Bacchiani están a nombre de terceros y que no fueron escriturados, sino que sólo cuenta con recibos de compraventa. Para ello, informó en qué escribanía se rubricaron estos acuerdos.
En el planteo que se dirime en el fuero civil catamarqueño, la mujer solicitó quedarse con el centro de estética que tiene en la capital de la vecina provincia, una casa que está a nombre de un tercero en la villa turística de El Rodeo y que además le entregue U$S 2 milllones (a valor hoy unos $60 millones).
Paralelamente, señaló que era falso que el acusado estuviera interesado en el cuidado de su hijo. Relató que en una oportunidad debió trasladar al niño de urgencia a Buenos Aires y no recibió ningún tipo de ayuda de su parte y denunció que él se había trasladado en un vuelo privado. También contó que en el día del cumpleaños del pequeño, decidió llevarlo al penal para que soplara las velitas con el empresario, pero Bacchiani se negó a recibirlos.
Trascendió que el defensor del dueño de AC presentaría un escrito para desmentir toda la información que brindó su ex mujer.
La causa
Mientras se ventilan estas cuestiones en tierra catarmaqueña, el expediente en el que se investiga las millonarias estafas en contra de inversionistas está paralizado desde que el juez federal Contreras decidió declararse incompetente en los delitos de estafa y asociación ilícita y desestimar la acusación de lavado de activas.
Los fiscales federales catamarqueños decidieron apelar la resolución y el caso será analizado por la Cámara Federal de Apelaciones. Se estima que darán a conocer su fallo dentro de dos meses.
Mientras tanto, la Corte Suprema de Justicia de Catamarca aún no resolvió qué hará con el expediente, ya que el juez Contreras entendía que los delitos de estafa y asociación ilícita debían ser investigados por el fuero provincial. El problema radica que el magistrado federal, en una polémica decisión, ordenó acumular las denuncias que se realizaban en contra de Adhemar. En la causa aparecen damnificados tucumanos, mendocinos, bonaerenses, neuquinos y catamarqueños, entre otros.
El máximo tribunal de la vecina provincia ya se había declarado incompetente y girado las causas a Contreras. Ahora no definió qué hará, si se quedará con el grueso de las denuncias o si las enviará a los tribunales de origen.
En Catamarca la Justicia Federal sigue recibiendo pedidos para que se investigue a Bacchiani por lavado de activos. Para los querellantes hay un nuevo hecho: no se investigó el origen de los U$S 50 millones ni quién es el amigo que aportó esa suma de dinero para que el empresario comenzara a devolver el dinero. Los pagos quedaron paralizados desde hace poco más de un mes.
Antecedentes: otras mujeres que complicaron a sus ex
En la historia reciente de nuestro país existen varias mujeres que complicaron procesalmente a sus ex parejas. La mendocina Laura Muñoz (foto) denunció a su esposo Alejandro Vandenbroele como testaferro del ex vicepresidente Amado Boudou, que terminó condenado. Karina Jelinek también declaró en contra de su ex, Leonardo Fariña, que se convirtió en testigo clave en causas de corrupción de funcionarios kirchneristas. Hilda Horovitz también reveló detalles de cómo su ex, el ex chofer Oscar Centeno, trasladaba dinero en bolsos que supuestamente eran producto del pago de sobornos. El llamado “Robo del siglo” se esclareció porque Alicia Di Tullio identificó a los ladrones que vaciaron las cajas de seguridad de un banco, al enterarse de que su pareja, que había participado en el hecho, pensaba fugarse con el botín y su amante.