Por Daniel Alfredo Coronel
26 Julio 2023
REUTERS
Si alguien dudaba del efecto que podría causar la llegada de Lionel Messi al fútbol de Estados Unidos, en un puñado de minutos demostró lo que es capaz de hacer. ¿Alguien dudaba? Si ya la “rompió” en ligas de elite... Está todo dado para que ahora se haga un festín y, al parecer, va camino a eso.
En la MLS su nuevo equipo era una lágrima (lleva apenas cinco victorias en 22 juegos) con 11 partidos sin ganar. Sin embargo el arribo de Messi coincidió con el inicio de la Leagues Cup y todo cambió. La victoria sobre Cruz Azul (2-1) en el debut y la goleada sobre Atlanta United anoche (4-0), le dieron la clasificación a los 16vos de final con puntaje perfecto, pero sobre todo con un rendimiento colectivo muy bueno.
Para entender un poco lo que causó Messi en apenas unos días en Inter Miami, basta con un dato: anoche fue la primera vez en la historia del club que el equipo se va al entretiempo con una ventaja de tres goles. Sí, en cinco años de competencias, el equipo de David Beckham nunca había conseguido esa diferencia en 45 minutos y anoche con doblete de Messi (anotó a los 8’ y 22’) más el gol de Robert Taylor, el conjunto de Gerardo Martino aplastó al Atlanta de los argentinos Thiago Almada y Santiago Sosa.
Como ante los mexicanos en la primera fecha, a Inter le costó unos minutos acomodarse en el campo. De hecho, Drake Callender (a los 85’ le atajó un penal a Almada) tuvo acción en los primeros 5’ de juego: gol anulado a Tyler Wolff por offside previo de Almada y en la siguiente jugada el palo salvó a los locales.
Fue cuestión de tiempo hasta que Sergio Busquets y Messi frotaron la lámpara para que el partido se encaminara a una goleada histórica. “Busi” con espacio y tiempo en el medio es tan peligroso como Lionel encarando con pelota dominada. El pase frontal y de emboquillada a Messi (¿cuántas veces se habrá visto esto en la Liga de España?) fue un puñal para Atlanta United. Messi definió de zurda y corrigió de derecha -después de que la pelota fuera devuelta por el palo- y a otra cosa. Iban 8’ minutos y el partido le dio lugar al monólogo de Inter.
A los 22’ Messi -otra vez- definió de derecha para su primer doblete en Miami y el festejo a lo Iron Man. A los 44’ llegó el 3-0 histórico y así se fueron a los vestuarios.
Se esperaba más de Atlanta United, que le hizo poca fuerza a un Inter que todavía está gestando lo que promete ser un equipo de ensueño. Vale aclarar que todavía están resolviendo la llegada de Luis Suárez y Jordi Alba, para darle más vuelo a un plantel que con las dos nuevas estrellas ya dio muestras de su poderío.
En el complemento Atlanta United salió pensando en no recibir más goles, pero se olvidó de atacar y por eso el partido bajó en intensidad y fue más aburrido.
Además, Messi y los suyos sacaron el pie del acelerador y apenas si hubo dos jugadas destacadas. A los 8’ Leo lideró un contragolpe ideal -después de un regalo rival- y cedió a tiempo para que el finlandés Taylor también anotara su doblete, y el 4-0 definitivo.
A los 77’ el estadio se puso de pie para ovacionar al “10”, que fue reemplazado por Robinson. Claro que Leo tuvo tiempo para sacarse la cinta, saludar a su público y salir con una sonrisa de oreja a oreja. Otra vez figura: lleva 114 minutos en Inter, tres goles y una asistencia.
Messi llegó a Miami y con dos partidos ya revoluciona el fútbol de Norteamérica, se lo nota feliz en la cancha y fuera de ella. Lejos de la elite europea y sin la presión de esa competencia, Leo seguirá siendo el dueño del show. Si alguien merecía esta tranquilidad y este momento, era él. Disfrute, maestro.
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