El 27 de julio una familia denunció que fue víctima de un escruche en su vivienda de calle 9 de julio al 3.000, en Villa Amalia. Los asaltantes se llevaron diversos electrodomésticos y otros objetos de valor mientras las víctimas no estaban en casa.
En el caso tomó intervención al división Robos y Hurtos de la Policía, a cargo del comisario Marcos Morante, y la Fiscalía de Robos y Hurtos II.
La unidad especializada comenzó la investigación con al toma de declaración a testigos que pudieran haber visto algo y solicitando que les aportaran los videos de las cámaras de seguridad a los vecinos. De esta manera, “el equipo asignado obtuvo declaraciones testimoniales de vecinos, y así se logró individualizar quiénes serían los autores del hecho y el medio de movilidad utilizado para la comisión del ilícito”, precisó Morante.
Ya con la información obtenida se solicitaron medidas de allanamiento para seis viviendas ubicadas en el gran San Miguel de Tucumán, solicitudes que fueron aceptadas y ordenadas por el juez Eduardo González.
Como resultado, se produjo el secuestro de un automóvil, (presuntamente usado en la comisión del robo) una barreta y un cortahierro que habrían sido empleados para forzar los accesos a la vivienda, entre otros elementos de interés para la causa.