Por Joel Katz
19 Septiembre 2023
Siempre se sostiene que Argentina, deportivamente hablando, es local en todos lados. Y claro, el rugby, uno de los deportes con más popularidad en el país, no es la excepción. En el debut de Los Pumas en el Mundial de Francia, aproximadamente 12.000 argentinos coparon el Stade Velodrome de Marsella, para alentar a los dirigidos por Michael Cheika. Entre ellos, el rugbista tucumano Juan Ignacio Cruz, ex Universitario, y actualmente jugando en Italia.
Cruz, que está por comenzar su cuarta temporada en el rugby italiano (segunda de manera consecutiva), vistiendo los colores del Valorugby Emilia, cuenta que viajó junto a un grupo de argentinos que también juegan en el club, y que aprovecharon el fin de semana libre en medio de la pretemporada, para vivir la experiencia de estar en un Mundial.
“Fuimos por lo que significa ver un partido de Los Pumas contra Inglaterra, en un debut de Mundial. La verdad es que estaba muy bueno el plan, así que le dimos para adelante, lo organizamos y fuimos. Ya no tenemos tiempo libre porque estamos en pretemporada y no tenemos más fines de semana ni días sin entrenamientos”, relató en diálogo con LA GACETA, anticipando que no podrá ver otro encuentro del combinado argentino en el certamen.
Pero además, “Juani” tuvo una motivación extra para tomar la decisión de viajar a Marsella. Dos, en rigor. Por un lado, la posibilidad de ver, por primera vez en su vida un partido de un Mundial de rugby. Y por el otro, la chance de ver debutar a un amigo de toda la vida en esta competencia: Thomas Gallo, ex compañero suyo en Universitario.
“Junto con Santiago Resino, que somos los dos de ‘Uni’, y lo conocemos de siempre a ‘Gallito’, hemos pensado ‘¿cómo puede ser que nuestro amigo esté por debutar en un Mundial, con lo importante que es, y no ir para estar allí en ese momento?’ Esa ha sido la principal motivación”, admite Cruz. Además del propio Resino, otro tucumano que integró el grupo que viajó desde Italia a Marsella fue Nicolás Triviño, otro con pasado en Universitario.
No hubo factor que pudiera alterar para mal la experiencia del jugador del Valorugby en Marsella. No lo hizo el resultado adverso para Los Pumas; tampoco el hecho de que el grupo que viajó tuviera que dividirse en los distintos sectores del estadio, por haber comprado entradas cerca de la fecha del partido -la previa y todo el viaje lo hicimos juntos-”, subraya.
“Fue un ambiente hermoso. Ver tanta gente, tantos argentinos. Ha sido un momento muy lindo. El estadio es increíble”, recuerda Cruz. “Fue mi primera vez en un Mundial; uno nunca sabe cuándo se va a volver a dar una posibilidad así. No me arrepiento, fue una hermosa elección”, expresa.
“En esta situación, en un Mundial viendo a un amigo de toda la vida jugarlo, el resultado queda totalmente en segundo plano”, continúa “Juani”, quien luego sí se refirió a la parte más “deportiva”, anhelando un futuro positivo para el seleccionado argentino en el Mundial.
“Espero que los Pumas puedan revertir lo del primer partido en lo que queda, tienen todo para hacerlo. El partido se modificó mucho o quedó condicionado por la roja de Inglaterra, que los llevó a hacer otro juego. Siempre apoyando, porque me imagino el esfuerzo, las ganas de ganar y demostrar que tienen con qué. No debe ser fácil estar en un Mundial. Lo vivo siempre con Thomi, que deja muchas cosas por mucho tiempo y por la preparación que le lleva estar ahí. Espero que tengan resultados; por ellos, pero también por la camiseta,” concluyó Cruz, el protagonista de un viaje soñado.
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