Los empresarios confían en que Jaldo solucionará la crisis del transporte

“Tenemos muchísimas expectativas en los Gobiernos entrantes”, admitió Berretta.

Todas las empresas están en situación de quebranto. No podemos afrontar los compromisos contractuales, comerciales o fiscales, Jorge Berretta, vicepresidente de Aetat. "Todas las empresas están en situación de quebranto. No podemos afrontar los compromisos contractuales, comerciales o fiscales", Jorge Berretta, vicepresidente de Aetat.
27 Septiembre 2023

Con el mismo énfasis con que responsabilizó por la crisis del transporte al gobernador, Juan Manzur, y al intendente de San Miguel de Tucumán, Germán Alfaro, el vicepresidente de la Asociación de Empresarios del Transporte Automotor de Tucumán (Aetat), Jorge Berretta, posó sus esperanzas de solución sobre los sucesores de aquellos, Osvaldo Jaldo y Rossana Chahla, respectivamente. “En su tiempo como gobernador, Jaldo se reunió con nosotros; y entendió. Se peleó con Buenos Aires. Con el margen que tuvo demostró que una de sus prioridades será el transporte. Tenemos muchísimas expectativas en los Gobiernos entrantes, de Jaldo y de Chahla”, afirmó Berretta.

El empresario aportó sus visiones sobre el problema en un debate que se realizó en el programa Panorama Tucumano -la nave insignia de LGPlay-, del cual también participaron los legisladores José Ascárate (Juntos por el Cambio) y Armando Cortalezzi (Unión por la Patria). Como moderador actuó el periodista Federico van Mameren, conductor del ciclo.

“Mañana (por hoy), a las 9.30, nos recibe el vicegobernador en la Legislatura, para tratar de solucionar este problema, cosa que no hizo Manzur. Siempre tuvimos buen diálogo (con Jaldo); y entendió la situación. Me gustaría que podamos solucionar la coyuntura, y empezar a hablar de un plan para el transporte a partir del 29 de octubre (cuando cesan los actuales mandatos). Hacen falta políticas de Estado para el transporte”, dijo Berreta.

Durante el día de hoy, los dirigentes de la seccional local de la Unión Tranviarios Automotor (UTA) realizarán paros sorpresivos en todos los servicios de ómnibus de la provincia.

“Es una tema preocupante; porque la ciudadanía -en este caso, cerca de 700.000 personas que usan los colectivos- lo padece. Los Estados nacional, provincial y municipal deben hacerse cargo; y los empresarios deben tomar consciencia de que un servicio público no puede tomar a la gente de rehén. Quizá los choferes tengan derecho a hacer un paro, pero no sorpresivo”, reprochó Cortalezzi. El oficialista endilgó la responsabilidad de esta medida de fuerza a los empresarios; pero Berretta le precisó: “Nosotros no hacemos el paro”.

Ascárate, en tanto, le dio la razón a los empresarios, a partir del cotejo de ingresos y de egresos promedios de las firmas. “Una empresa percibe al mes por subsidios nacionales y provinciales y por el pago de los boletos para jubilados y para estudiantes unos $ 45 millones. A esto se suman $ 24 millones de recaudación. Esa cifra se va solo en salarios y en gasoil”, puntualizó. Y propuso una fórmula para alcanzar la solución a la crisis del transporte: “El Estado debe bajar impuestos y subir subsidios”.

A criterio de Berretta, falta un sinceramiento; en particular, de parte de la clase dirigente. “Aquí hay un problema de costos. Sin compensaciones tarifarias, el boleto mínimo debería costar $ 600. Y esto es histórico; siempre el viaje costó lo mismo: entre U$S 0,90 y U$S 1. Hoy, el usuario paga $ 120 y los subsidios nacionales y provinciales suman otros $ 115 al boleto; menos del 50%. Cuando el usuario pague real pago del transporte, o el Estado compense el resto esto se soluciona en dos años. Pasa que estos últimos Gobiernos quieren el beneficio para el usuario, pero no se quieren hacer cargo de la otra parte”, acusó el empresario.

“Podemos hablar de números; sabemos que no hay equidad en la distribución de subsidios nacionales, porque más del 80% se lo lleva el Área Metropolitana de Buenos Aires y el resto se lo reparten las 23 provincias. Pero al usuario no le importa esto; lo único que quiere es que un colectivo lo lleve al trabajo y lo regrese a su casa”, dijo Cortalezzi.

Comentarios