El futuro del peronismo: entre la renovación dirigencial y el fin de un ciclo

Cuatro años más tarde del triunfo conseguido por Alberto Fernández sobre Mauricio Macri, con más de 12 millones de votos a su favor, el peronismo sufrió una de las derrotas más contundentes desde la restitución democrática en 1983. La fórmula de Unión por la Patria (UxP), Sergio Massa - Agustín Rossi cosechó 11.330.665 votos, de acuerdo a los datos del escrutinio provisorio, y solo consiguió victorias en tres jurisdicciones: Formosa, Santiago del Estero y provincia de Buenos Aires. Con estas cifras, el mapa del país se confeccionó de una manera absolutamente diferente a lo que mostraba hace cuatro años atrás, cuando el color celeste teñía a 18 jurisdicciones y solo el centro del país se había inclinado por el binomio de Juntos por el Cambio (JxC).

“Los argentinos eligieron otro camino. Ahora, la responsabilidad de dar certezas, de transmitir garantías sobre el trazado social, político y económico, es responsabilidad del presidente electo. Esperemos que lo haga”, fueron las palabras que expresó Sergio Massa para reconocer la derrota, minutos antes de que se conocieran los datos oficiales de la Cámara Nacional Electoral (CNE).

Más allá de reconocer el revés electoral y destacar que pudo comunicarse con Javier Milei para felicitarlo por la victoria, Massa aseguró que tomó esta decisión “convencido de que lo más importante que tenemos que dejarle a los argentinos es que la convivencia, el diálogo y la paz es el mejor camino que podemos recorrer”.

Fin de ciclo

Teniendo en cuenta la contundencia de los resultados, Massa adelantó que en su contacto con el presidente electo pudo transmitirle la intención de que junto al presidente Alberto Fernández se pongan en marcha los mecanismos necesarios para iniciar la transición durante los próximos 19 días. Además, el titular del Palacio de Hacienda anunció que a nivel personal culminó una etapa en su vida política. “Hoy termina una etapa en mi vida política. Seguramente la vida me depare otras tareas y responsabilidades. Sepan que siempre van a contar conmigo defendiendo los valores del trabajo, la educación pública, la industria nacional, el federalismo, como valores centrales de la Argentina”, dijo.

Estas palabras, en tono de despedida, no solo se leyeron en clave peronista, sino también que hicieron crecer los rumores sobre el futuro que correrá el ministro en el Palacio de Hacienda.

“El ministro de Economía y ex candidato presidencial de Unión por la Patria, Sergio Masa, se tomará licencia en el Palacio de Hacienda para ‘facilitar la transición’ con el mandatario electo Javier Milei. La transición quedará a cargo de Raúl Rigo y del presidente del Banco Central, Miguel Pesce”, publicó la agencia Noticias Argentinas. Sin embargo, esa noticia no fue confirmada por Casa Rosada y si se adelantó que el presidente Fernández se reunirá en las próximas horas con Milei. El titular del Banco Central (BCRA), Miguel Pesce, y el secretario de Hacienda, Raúl Rigo formarían parte del conclave.

Barajar y dar nuevo

Indudablemente, el peronismo está obligado a realizar un replanteo para entender los resultados que lo dejaron afuera de la presidencia. El panorama luce similar al de 2015, cuando Macri logró imponerse sobre Daniel Scioli en un balotaje reñido.

Massa hizo mención al proceso que deberá afrontar el movimiento nacional y sostuvo que más allá de su persona “hay miles de argentinos que tienen la convicción y el valor de defender ese país inclusivo en el que creemos”. “Por eso que vengan las nuevas generaciones, sigamos haciendo el recambio democrático que necesitamos, que miles de jóvenes de la Argentina sigan enamorándose de la idea de que este es un gran país, y que entre todos podemos hacer un país de progreso y desarrollo inclusivo y con igualdad de oportunidades. Gracias compañeros y compañeras, a los 11 millones que confiaron en nosotros. Sigamos defendiendo el sueño de la Argentina justa”, remarcó.

A pesar de quedarse sin la conducción del país, el peronismo se recluirá en las diez provincias que gobierna y Buenos Aires, como principal distrito político, será crucial. Y la figura del gobernador Axel Kicillof puede ser una de las claves para la reconstrucción peronista de los próximos años.

También es importante destacar, que los resultados del balotaje en la provincia más poblada del país, ubicaron a Kicillof como uno de los pocos gobernadores triunfadores, pero con una magra diferencia sobre la alianza libertaria y no pudo ser “la llave de la victoria” nacional de UxP.

El papel de Cristina Fernández de Kirchner será uno de los principales enigmas a resolver en el futuro cercano. La ausencia de la vicepresidenta en la campaña electoral del oficialismo fue notoria y de hecho, ayer permaneció en Santa Cruz, lejos del búnker de Massa, que sin embargo tuvo la presencia de Máximo Kirchner, quien forjó en los últimos años una relación personal fluida con el ministro de Economía y ahora excandidato presidencial.