Serrizuela: "Para nosotros, Diego está siempre"

El ex jugador de Independiente y de Racing, entre otros clubes, reconoce que la imagen de Maradona está muy presente, sobre todo, por el gran presente de la Selección Argentina.

EN CANCHA. Maradona, Serrizuela y atrás Caniggia, en el Mundial 1990, EN CANCHA. Maradona, Serrizuela y atrás Caniggia, en el Mundial 1990,

El Mundial de Italia 1990 fue para muchos un fuerte trago amargo. Tras el título logrado en México cuatro años antes, el bicampeonato quedó a un paso. Aquel polémico penal sancionado por el mexicano Edgardo Codesal, y que Andreas Brehme cambió por gol para consagrar a Alemania, frustró una nueva fiesta. Sin embargo, para José Tiburcio Serrizuela fue también una experiencia inolvidable; en gran parte por la posibilidad de compartir plantel con Diego Armando Maradona.

“Uno se da cuenta de esas cosas cuando alguien se las marca. Hoy digo ‘que bárbaro, tres años ya’, pero es como que Diego siempre está. Para nosotros, que compartimos cancha, vestuario, concentraciones, Diego está siempre”, expresó Serrizuela, en diálogo con LA GACETA.

El ex jugador de Independiente y de Racing, entre otros clubes, reconoce que la imagen de Maradona está muy presente, sobre todo, por el gran presente de la Selección Argentina. “Los que vivimos esos momentos lindos junto a Diego lo sentimos así. En todas estas cosas que le suceden a Argentina tiene una gran importancia Diego. Tras haber ganado la Copa América en el Maracaná y después el Mundial contra Francia, asoman los recuerdos del nuestro futbolista más grande. Hoy a Argentina la respetan muchísimo en el mundo y Diego tuvo gran importancia en que eso suceda”, reflexionó.

¿En qué influenció Maradona positivamente al fútbol argentino, más allá de lo estrictamente futbolístico? De acuerdo a la visión del nacido en Taco Ralo, el avance en la situación económica de los jugadores es gran responsabilidad del genio de Villa Fiorito.

“Personalmente recuerdo a Diego por lo que peleaba por nosotros. Tiene mucho que ver con el presente del fútbol argentino, con el presente de los jugadores. En nuestra época se ganaba muy poco dinero cuando sucedían eventos como el Mundial. Él veía la cantidad de dinero que se movía, y peleaba para que tuviéramos más participación en lo económico y para que sea todo más equitativo. Lo logró; a partir de 1994, el jugador está como debería estar, gana muchísimo más”, detalló.

“Siempre lo pongo de ejemplo en ese sentido. Peleaba por el jugador, que bien ganado lo tiene porque es el protagonista principal del deporte, el que mueve el espectáculo. Nadie antes lo hizo, y fijate que ahora tampoco. Muchos jugadores se callan la boca, siguen haciendo su vida, terminan su carrera y desaparecen. Diego siempre peleó por nosotros y así lo recuerdo yo”, completó.

Experiencia mundial

Hasta 1990, el ex defensor tucumano no había tenido la posibilidad de compartir junto a Maradona, que en ese entonces ya era un futbolista consagrado. En aquel Mundial, tuvo la primera experiencia, y recuerda que lo sorprendió la simpleza de Diego y la entrega por sus compañeros. “Era un loco defensor de los compañeros. Tenía una energía enorme, siempre positiva. Todo lo que yo veía antes, lo comprobé ahí. Era un fenómeno de verdad Diego; era para destacar. Soy un agradecido de haber tenido la posibilidad de jugar con el más grande”, rememora, con nostalgia.

En los años siguientes, tuvo un par de oportunidades de encontrárselo nuevamente en una cancha de fútbol, aunque esa vez como rivales. Eso le generó incluso, según recuerda, un sentimiento de incomodidad. “Lo enfrenté en su regreso a Boca. Yo jugaba para Racing y fue el partido más incómodo de mi vida porque lo tenía que marcar y era muy difícil para mí. Lo tenía que parar pegándole y yo no quería eso”, relata con una sonrisa amplia.

Lo que lamenta Serrizuela es no haber podido verlo nuevamente en los últimos años antes de su fallecimiento. “Cuando ya estaba en Gimnasia, por intermedio de un amigo estaba buscando verlo porque mi hija más chica quería sacarse una foto y conocerlo. Estábamos armando eso, justo se enferma y le pasa lo peor. Tenía muchísimas ganas de verlo, de hablar con él. Después de lo que pasó, siento mucho no haber podido verlo antes”, se lamenta.

“Lo que hace a la historia son los grandes. Diego escribió una parte muy importante en el fútbol argentino, y que hay que decirlo constantemente. Nosotros, que vivimos momentos con él, vemos a la Selección y se aparece Diego. Lo veo en alguna publicidad, y sigue estando ahí; no se va porque hizo cosas importantes”, concluye melancólico el defensor.

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