Se terminó el 2023 para Atlético Tucumán, un año que estuvo marcado por la irregularidad. El equipo de Lucas Pusineri había comenzado el nuevo calendario ilusionado, luego de haber realizado una campaña histórica en el fútbol argentino, que lo había sostenido durante varios meses como puntero de la Liga Profesional y terminó con la dupla técnica al mando y lamentándose haberse quedado en la puerta de una clasificación internacional.
El año con Pusineri en el primer semestre no fue nada bueno. En los 23 partidos que el DT estuvo en el banco este año, el equipo apenas ganó cinco, en tanto que empató y perdió nueve. Una efectividad del 34% que le terminó costando el puesto a falta de cinco partidos para finalizar la Liga Profesional.
El último partido de Pusineri en el banco fue un 1-0 ante Unión, gracias al gol de Mateo Coronel, horas después de consumado ese triunfo, el técnico anunció que no continuaría en el cargo, sosteniendo que no podía trabajar sin la posibilidad de pensar a largo plazo. En aquel momento, la situación del cuerpo técnico dependía siempre del resultado del próximo partido.
El “decano” la pasaba mal en la tabla de los promedios y también se ubicaba peligrosamente en la zona baja de la tabla general, el golpe de timón era necesario para poder enderezar un rumbo que venía cruzado. Como si lo deportivo fuera poco, Miguel Abbondándolo, dirigente “decano” que desde hacía más de 10 años se encargaba de los fichajes de los jugadores, renunció luego que se viralizara una imagen suya flameando una bandera de Boca en el partido despedida de Juan Román Riquelme.
En un puñado de días, Atlético se quedó sin manager y sin técnico. Rápido de reflejos, Mario Leito tuvo que salir a buscar reemplazante para Abbondándolo, con el equipo sumido en la zona baja y el DT tambaleando. De esa manera se produjo el regreso de Cristian Lucchetti al club de sus amores, para ocupar el lugar que había dejado vació el dirigente “decano”.
El primer gran acierto de Lucchetti en su nuevo cargo fue la contratación de Sergio Gómez y Favio Orsi para la dirección técnica del equipo principal. Al cargo de la dupla técnica, Atlético disputó 19 partidos, ganó ocho, empató seis y perdió cinco. Esa regularidad le permitió salir rápidamente de la zona baja de las tablas y casi le basta para clasificar a Copa Sudamericana, pero el último cupo para el torneo sudamericano quedó en manos de Argentinos Juniors por diferencia de gol. Situación que llevó a los hinchas a molestarse con los entrenadores, por entender que en algunos partidos, se hicieron planteos mezquinos.
Desde lo deportivo, Atlético jugó 42 partidos durante el año, 14 fueron por la Copa de la Liga, 27 por la Liga Profesional y uno por Copa Argentina. De los 42 juegos, el “decano” triunfó en 13 oportunidades. Empató 15 veces (igual cantidad que en 2022) y perdió 14 partidos.
Se quedó afuera de la Copa Sudamericana por diferencia de gol y es lógico, el ataque fue una de las grandes falencias que demostró el equipo a lo largo del año. Convirtió apenas 35 goles, menos de uno por partido y 12 menos que el año pasado en prácticamente la misma cantidad de partidos (2022 jugó 43).
En donde tuvo un año destacado fue en el aspecto defensivo, le marcaron 42 goles (cuatro menos que en 2022) y tuvo a un Tomás Marchiori como figura en varios partidos. El arquero mendocino mantuvo la valla invicta durante 18 partidos, un número realmente para destacar. Por su parte, Coronel con 10 tantos fue el goleador del año para los de 25 de Mayo y Chile.
¿Cómo arranca el 2024?
Las expectativas son buenas; la continuidad de la dupla técnica en el plantel principal está garantizada, en tanto que Lucchetti trabaja para conseguir los refuerzos que esperan los ex técnicos de Godoy Cruz. Sergio Ortíz (casi abrochado), Nicolás Morgantini y Gianluca Ferrari (en conversaciones) serían los tres primeros refuerzos, aunque no serán los únicos, sobre todo por la cantidad de jugadores que no seguirían en el club. La pretemporada comenzará pasado mañana y el “decano” jugará dos amistosos en Uruguay, el 15 y el 18 de enero, ante Danubio y Cerro Largo.
En Reserva hubo apuesta y renovación, propuesta por Lucchetti. Hubo un movimiento generalizado, que desembocó con la asunción de Diego Barrado y Andrés Jemio como la dupla que conducirá el camino del equipo de Reserva en el Torneo Proyección. También hubo movimientos en las coordinaciones, Martín Anastacio estará a cargo de las categorías más chicas, en tanto que Carlos Araujo supervisará el día a día de la Cuarta, Quinta, Sexta y Reserva.
¿Habrá obras en el 2024?
Sí. Atlético desde hace unos meses se encuentra en plenas tareas de mejoras edilicias tanto en el complejo José Salmoiraghi, como en el estadio José Fierro. Además, el “decano” está reacondicionando la cancha de San Jorge, donde se entrenará la Primera y posiblemente juegue la Reserva y el equipo de la Liga Tucumana. En tanto que la proyección que tienen los directivos es que no finalice el 2024 sin antes inaugurar al menos tres canchas en el predio de San Andrés, donde se prevé que sea el foco de las obras de este año.